Agricultura de Precisión: “Blockchain”, la nueva forma de gestionar datos para aumentar la precisión

En un país agroexportador, analizar los grandes flujos de datos que genera cada tonelada de carne y de granos producida parece una meta difícil, pero no inalcanzable.

En los próximos 20 años, la agroindustria argentina se centrará en mejorar los sistemas de innovación para abastecer mercados con consumidores que son cada vez más exigentes y responsables. Ser capaces de trazar un proceso que brinde información desde la semilla hasta la góndola, será la próxima meta.

Para Juan Pablo Vélez –especialista en herramientas de agricultura de precisión del INTA Manfredi, Córdoba–, “el registro de datos y la certificación de la producción se ha convertido en el nuevo foco de la innovación” y agregó: “Valorizar la producción mediante las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) es una gran oportunidad”.

Y, en este sentido, reconoció que “existe una gran demanda de tecnología con el objetivo de aprovechar los datos disponibles en la nube y, así, producir de un modo más inteligente y agregar valor”.

Es que, de acuerdo con el investigador, las BPA –como el cuidado del agua y del suelo, la rotación de cultivos, la responsabilidad con los trabajadores y la reducción en el uso de fitosanitarios– son activos, por los cuales el consumidor está dispuesto a pagar un precio diferencial. “Hay un consumidor responsable que demanda información y exige que los alimentos se produzcan con la mayor inocuidad posible”, señaló.

La Argentina es un país de casi 3 millones de kilómetros cuadrados de superficie que, a su vez, cosecha millones de toneladas de granos y carnes al año. En este contexto, procesar la información que se genera parece una meta difícil, pero no inalcanzable.

Para resolverlo, resultan clave algunos conceptos que hacen referencia al procesamiento de grandes cantidades de números y cifras como la Internet de las cosas o IoT –la conexión avanzada de dispositivos, sistemas y servicios– y blockchain –una base de datos distribuida que registra bloques de información y los entrelaza para facilitar su recuperación–.

A su vez, se suman la Big Data o inteligencia de datos junto con la minería de datos, la inteligencia artificial y Machine Learning –técnicas que permitan a las computadoras aprender–.

“Sólo mediante estas tecnologías disruptivas será posible cuantificar, registrar y almacenar cada variable de nuestra labor como productores y podremos ser capaces de trazar el proceso a fin de mostrarle al consumidor toda la información que demanda”, aseguró el técnico de Manfredi

Fuente: Prensa INTA Manfredi