Súplicas por lluvias para no bajar rindes

Las reservas comienzan a escasear. Las napas que mantienen los cultivos se están agotando. Con estas lluvias los maíces tempranos se juegan 10 quintales, hacia arriba los muy buenos, hacia abajo los regulares. El grueso de las sojas en pocos días ingresa a fructificación. Si no hay lluvias importantes, bajarán los rindes..

El maíz temprano está 13 qq/ha debajo del ciclo pasado El 90% de los maíces está concretando el peso de los granos. Aquellos que todavía se abastecen de las napas cercanas podrán resistir algunos días más. Por eso es crucial una lluvia de consideración para que los rindes no bajen aún más. Los promedios se estiman en 87 qq/ha, 13 quintales por debajo de lo obtenido el ciclo anterior. Las expectativas más altas están puestas en el sudeste de Córdoba y en la esquina noreste de Buenos Aires; que fueron las zonas que recibieron las mayores descargas de las últimas lluvias. La situación del cereal en el noroeste y centro-norte bonaerense es sumamente crítica. Ya hay lotes que se por dan perdidos. Aquellos sectores influenciados por la napa proyectan rindes entre 70 y 80 qq/ha. La falta de agua en el periodo más crítico del cultivo produjo fallas en la polinización, reduciendo el número de granos por espiga. Un 15% se los considera en estado regular. A días de la fructificación de la soja y las napas empiezan a agotarse Un 35% de los lotes de soja están comenzando la fase crítica y un 60% en pocos días más ingresará a esta etapa. Las reservas de agua comienzan a limitar el crecimiento. Será fundamental que las lluvias vuelva en grandes volúmenes para no bajar el potencial de rinde. 420 mil ha de soja están en condiciones regulares. Si bien el cultivo resistió un poco más el estrés termo-hídrico, hay algunos sectores donde se observan manchones y plantas más pequeñas. Sin plagas que justifiquen su control, las malezas siguen siendo el principal inconveniente. Las gramíneas resistentes y el yuyo colorado crecen en cada espacio perdido por el cultivo. Ya se piensa en los altos costos que habrá que pagar el próximo ciclo por la gran cantidad de semillas que se están alojando en el suelo. Los cultivos de segunda mejor pero tiene que llover Contrario a lo que sucede con los cultivos tempranos, las sojas y los maíces de diciembre están atravesando un buen momento. Las últimas lluvias han permitido buenas emergencias y están creciendo sin inconvenientes. Sin embargo, para mantener las buenas condiciones de los cultivos tiene que llegar el agua a la región en buena cantidad. El norte de Buenos Aires espera concretar las siembras que restan. Unas 50.000 ha aguardan ser implantadas.

Fuente: GEA