El cambio de tendencia en el mercado del trigo
En el primer trimestre del año, el mercado del trigo experimentó un cambio de tendencia significativo. Mientras que los insumos disminuyeron, las cotizaciones aumentaron, lo que generó un panorama más favorable para los productores.
Uno de los factores que contribuyó a este cambio fue el aumento de las importaciones de urea, con una reducción de precio de $140 por tonelada en el último mes. Además, los precios internacionales del trigo comenzaron a recuperarse, lo que mejoró la perspectiva de rentabilidad.
Impacto de las políticas gubernamentales
Los anuncios del gobierno sobre la reducción de impuestos a la importación de fertilizantes comenzaron a tener un impacto positivo en el negocio del trigo. Esto permitió una disminución en los costos de reposición de nutrientes, lo que, sumado a las proyecciones de un mejor precio para el trigo, ha permitido comenzar a restablecer la relación de precios entre insumos y productos.
Este cambio de tendencia es radical para el mercado del trigo, que hasta hace poco navegaba en la incertidumbre. Aunque la oferta hídrica se mantiene favorable, el horizonte económico era negativo. Sin embargo, ahora los vientos soplan a favor de la rentabilidad.
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Importaciones récord de urea
Según un informe elaborado por la consultora AZ Group, las importaciones de urea alcanzaron niveles récord en el transcurso del año. Hasta marzo, ingresaron al país 202,000 toneladas de urea, siendo las importaciones de marzo de 40,000 toneladas, otro récord para ese mes.
El informe también destaca que los anuncios de recorte de impuestos a la importación y la disminución de los costos financieros asociados al sistema SIRA permitieron una reducción en los precios de la urea. En concreto, los precios se redujeron en $140 por tonelada en el último mes, llegando a $550.
Mejora en las condiciones del trigo y los fertilizantes
La coyuntura actual en las cotizaciones del trigo muestra signos de cambio, lo que también debería tener un impacto en los planteos de fertilización. Aunque las compras se han retrasado en comparación con años anteriores, la mejora en las condiciones para el trigo debería estimular la demanda local.
En cuanto a los fosfatados, las importaciones de MAP y DAP también han disminuido, aunque sus precios también han bajado. El precio del MAP alcanzó los $869 por tonelada en abril, una disminución de $51 en comparación con el mes anterior.
Por otro lado, los precios del trigo han experimentado un aumento significativo tanto a nivel nacional como internacional. Después de varios meses de valores deprimidos debido a la gran oferta rusa, una combinación de factores a nivel internacional ha generado un aumento en los precios. Esto incluye los ataques rusos a puertos ucranianos y las condiciones climáticas adversas en Rusia, Europa y Estados Unidos.
En Argentina, los valores del trigo nuevo también han aumentado, lo que ha generado un aumento en las ventas. Sin embargo, aún queda un camino por recorrer en términos de comercialización de la cosecha.
A pesar de estos cambios favorables, es importante tener en cuenta que los stocks mundiales de trigo siguen siendo altos y que la situación actual en la producción podría revertirse en el futuro.