La soja subió un 2,4% en la semana y cerró a u$s 389,77 (nuevo máximo en 13 meses)

La soja avanzó un 2,4% en la semana a u$s 389,77 y se ubica en su mayor valor en más de un año, tras ganar este viernes un 0,3% sostenidos por nuevas operaciones de exportación y temores a que las condiciones secas en Argentina reduzcan el volumen de la cosechaen el Mercado Internacional de Chicago.

Además, el maíz aumentó un 3% a u$s 148,52 en los últimos cinco días tras caer en la rueda un 0,4% arrastrados por el fuerte descenso del trigo y el trigo se disparó un 8,8% a u$s 180,78 pese a haber bajado un 2,7% este viernes por una ronda de toma de ganancias por el fin de la semana.

El Departamento de Agricultura de Estados Unidos informó el viernes que los exportadores privados reportaron la venta de 198.000 toneladas de soja a China, segundo día consecutivo en que se anuncia una venta al mayor comprador mundial de la oleaginosa.

La soja para mayo subió 3 centavos y cerró a 10,71 dólares por bushel. En la semana, el contrato más activo registró un alza del 2,1 por ciento.

La firma privada Informa Economics redujo sus pronósticos de cosecha de soja y maíz 2017/18 de Argentina, según una nota a clientes a la que Reuters tuvo acceso el viernes.

El trigo blando rojo de invierno en Chicago fue el que sufrió las mayores pérdidas, con una caída del 3,2 por ciento -el mayor descenso porcentual para el contrato referencial desde el 10 de agosto- a 5 dólares por bushel, después de haber registrado seis subidas consecutivas.

El trigo duro rojo de invierno en Kansas bajó 9,75 centavos, o un 1,98 por ciento, y terminó a 5,3375 dólares por bushel, mientras que el trigo de primavera en Mineápolis cayó 14,50 centavos, o un 2,28 por ciento, a 6,2025 dólares.

Pese a los descensos del viernes, el contrato más activo en Chicago subió un 7,5 por ciento, su séptima alza semanal consecutiva y la mayor desde junio. En Kansas y en Mineápolis los avances fueron del 10 y del 3,2 por ciento, respectivamente.

El maíz para mayo cayó un centavo y cerró a 3,8525 dólares por bushel, porque la preocupación por el clima en Argentina y su impacto en la cosecha limitó el descenso de los precios. En la semana el contrato más activo subió un 5,1 por ciento, su mayor avance semanal en casi ocho meses.