Protesta de agricultores y camioneros en Europa, exigen cambios en impuestos y subvenciones

En la ciudad de Medyka, en el sudeste de Polonia, se están llevando a cabo protestas protagonizadas por agricultores y camioneros. Estas manifestaciones se originaron como un reclamo de los camioneros polacos, quienes exigían un mayor control comercial para sus pares ucranianos.

Sin embargo, los productores agropecuarios también se han unido a la causa. Los agricultores polacos están exigiendo la cancelación del aumento del impuesto agrícola, así como un acceso más fácil a préstamos blandos para apoyar la liquidez de sus granjas. Además, solicitan un bono de maíz de 1.000 PLN, que equivale aproximadamente a 250 dólares por hectárea.

El presidente del Consejo Nacional de Cámaras Agrícolas de Polonia, Wiktor Szmulewicz, ha declarado que la reanudación de las actividades de protesta depende de que el Ministro de Agricultura polaco cumpla con las demandas de los agricultores. Estos suspendieron su protesta en la frontera polaco-ucraniana en Nochebuena, pero están dispuestos a retomarla si no se cumplen sus demandas principales.


El Gobierno polaco ha respondido a estas demandas, afirmando que están esperando el consentimiento de la Unión Europea para subvencionar el maíz y que desean mantener los préstamos a bajo interés. También consideran que los gobiernos locales deberían poder eximir a los agricultores de los aumentos de impuestos agrícolas sin perder dinero. El Ministerio de Agricultura polaco ha señalado que se necesitan decisiones legislativas para preparar las soluciones a estas demandas. Mientras tanto, el embargo a la importación de cereales se mantendrá vigente.

El ministro afirma que esta medida es necesaria para controlar los procesos y limitar la entrada de ciertos productos agrícolas, basándose en la experiencia de Ucrania con Rumanía y Bulgaria. En conclusión, las protestas de agricultores y camioneros en Polonia están centradas en exigir cambios en los impuestos y subvenciones agrícolas. Las demandas incluyen la cancelación del aumento del impuesto agrícola, un acceso más fácil a préstamos blandos y un bono de maíz.

Tanto los agricultores como el Gobierno polaco esperan llegar a un acuerdo que satisfaga a ambas partes y permita resolver esta situación de manera favorable.

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