“Escuché a Kristalina Georgieva (directora gerente del FMI) diciendo que puede haber una gran crisis alimentaria y llamar a los gobiernos a tomar medidas, para evitar que eso genere los problemas sociales que trae. Los muchachos del FMI, no sé si el español lo dominan, pero en la Provincia no puede haber ajuste. Y lo tienen que entender porque estamos en una guerra en todo el planeta, en una situación extrema y venimos de una pandemia. Así que está muy bien que el Gobierno tome medidas. Nosotros apoyaremos. Y todo lo que falte lo vamos a pedir porque aquí con el conurbano y también con el interior (de la Provincia de Buenos Aires) no da más la situación social”.
El párrafo precedente corresponde a un fragmento de las declaraciones que el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, le dio al canal de noticias C5N, en las que se refirió a la aceleración inflacionaria, en especial en alimentos, y al impacto que tiene en la situación social de la provincia que gobierna.
Lo hizo citando a la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, la búlgara Kristalina Georgieva, acerca de la crisis alimentaria que puede haber a nivel global, atribuyó la principal causa de los aumentos de precios de los alimentos a la guerra entre Rusia y Ucrania, y aclaró que eso es lo que impacta de lleno en los sectores populares.
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Coincidencia
Kicillof hizo estas declaraciones periodísticas justo el mismo día en que el Gobierno Nacional multó a Molino Cañuelas, una de las harineras líderes y productora de alimentos farináceos, y a 2 cámaras que agrupan, respectivamente a grandes y pequeños y medianos molinos de trigo.
Al respecto, el gobernador se mostró partidario de las sanciones a la industria harinera, que debería pagar, de mantenerse firmes las sanciones y no ser apeladas por vía administrativa, hasta 150 millones de pesos.
“Evidentemente, con los precios de guerra que hay en el mundo, para algunos hay unos negocios bárbaros. El problema es que si esos precios de guerra los cobramos en Arrecifes o en la Provincia pueden generar una rentabilidad inmensa. No solo alguno se va a enriquecer mucho, otros se van a empobrecer. No lo podemos permitir. No tenemos que dejar que eso afecte los ingresos en términos reales. Todas las medidas son buenas, desde limitar la subida de los precios y recuperar ingresos, si se escapan los precios. El Gobierno está bien encaminado”, sostuvo.
Recuperación muy fuerte
No obstante, a pesar de la difícil situación social, Kicillof destacó que a nivel global hubo “una recuperación muy fuerte con respecto a la pandemia”, y afirmó que “en la mayoría de los países del mundo la recuperación estuvo por abajo de los números de pandemia. Nosotros (por Argentina) estamos arriba”, aseguró.
Dijo que “mejoraron algunos indicadores de pobreza y de empleo”, pero todavía “falta la distribución, los ingresos y los salarios”, sostuvo el gobernador. “Eso implica que los precios dejen de subir”, enfatizó.
También recordó que la inflación “es un tema con una larga historia”. Y para hacerlo apeló a su experiencia durante la gestión de Cristina Fernández: “Me tocó ser ministro de Economía y pelear contra los precios. Hay muchos factores que confluyen. Hoy también hay una guerra. La zona de conflicto (por la guerra entre Rusia y Ucrania) es productora de alimentos y gran proveedora de energía y de gas. Está habiendo una presión muy alta”, apuntó.
