Crédito: La Vanguardia
El joven de 19 años se encontraba trabajando sobre una cosechadora cuando sufrió la amputación de sus piernas que quedaron atrapadas en el sinfín barrenador. Tras la internación y los cuidados en el Hospital local, continuará su recuperación en el Inareps de Mar del Plata. En una entrevista con La Vanguardia contó cómo se repuso del grave accidente y cómo sigue su vida. Ejemplo de superación.
La vida de Joaquín Palacio (19) cambió para siempre. Un descuido y una caída cuando trabajaba sobre una cosechadora provocaron la amputación de sus piernas que quedaron atrapadas en el sinfín barrenador de la máquina. Fue el 19 de enero, en un predio ubicado en la calle 37, entre San Lorenzo y avenida Caseros. Joaquín es oriundo de la localidad de Rufino, en la provincia de Santa Fe, por lo que su familia rápidamente viajó a Balcarce para acompañarlo en este difícil momento. Tras el accidente, quedó internado en la sala de terapia intensiva del Hospital Municipal, pero rápidamente mostró una evolución que sorprendió hasta los propios médicos que lo asistieron. Desde entonces, la mejoría fue tal que hace dos semanas comenzó con la recuperación en el Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur de la ciudad de Mar del Plata. Antes de instalarse en la vecina localidad balnearia, Joaquín y su familia recibieron a La Vanguardia para hablar del momento por el que les toca atravesar y del agradecimiento que tienen para la comunidad de Balcarce. Rodolfo Argañaráz, el padrastro, Mariela López, su mamá, Francesca Argañaraz, la hermana, y Valeria, su novia, están más unidos que nuca pensando sólo en la rehabilitación de Joaquín.
-¿Cómo está hoy Joaquín?
–Mariela: Bien. Lo vemos bien, con mucho ánimo de seguir adelante.
-¿Cómo está siendo la recuperación?
–Rodolfo: la recuperación va bien. Hace dos semanas estuvimos en el INAREPS con los médicos, lo va a tratar un médico especialista y un psicólogo, pero nos dijeron que lo vieron muy bien. Toda la primera semana, de lunes a viernes, lo evaluaron y lo vieron tan bien que ya el miércoles de la semana pasada arrancó el gimnasio. No está en la situación como muchas personas que están ahí, y eso lo motiva porque creo que hay casos peores. Nos dieron el alta hasta el miércoles que arrancó con la actividad física. Él trabaja una hora o una hora y media en el gimnasio y después las otras 22 o 23 horas casi que está dando vueltas ahí adentro, mirando a la gente como está, porque hasta el otro día no tiene actividad. El proceso es ambulatorio, por lo que el martes pasado ya nos trasladamos para Mar del Plata. Alquilamos un departamento pequeño a cuatro cuadras del Inareps y lo llevaremos y lo traeremos de lunes a viernes porque el médico decidió que no quede internado.
-¿Qué les dicen los médicos?
-Mariela: Nos dicen que va bien, él se maneja solo, y los médicos se sorprenden de cómo está porque hay otros casos que necesitan ayuda sí o sí, pero Joaquín depende de él solo.
-Rodolfo: Nosotros lo acompañamos, claro, pero él hace todo solo, va al baño, se cambia, se viste, va al gimnasio solo. Se ha adaptado bastante bien, él es jovencito, tiene todas las pilas, y eso es lo bueno.
-¿Piensan en lo que pasó o es algo que ya quieren olvidar y arrancar una etapa nueva?
-Rodolfo: Nosotros en eso no pensamos, no queremos volver para atrás, siempre para adelante, queremos lo mejor para él y que vaya evolucionando de la mejor manera. Buscaremos las prótesis necesarias para que él siga lo más avanzado posible, y hoy hay muchas cosas que pueden ayudar gracias a Dios.
-Mariela: eso siempre está, ese momento trágico, pero seguiremos adelante a pesar de todo.
-¿Cuándo creen que él podrá hacer una vida normal?
-Rodolfo: los médicos nos dijeron que, como va, serán más o menos dos meses. Hoy tuvimos la reunión, y nos dicen que viene todo muy bien. Hay que ver cómo quedan los muñones, las vendas, que él mismo se aprenda a vendar para que eso se afine para, más adelante, poder poner las prótesis. De ahí tengo que hablar con la chica de las prótesis, que todavía no estuvimos con ella, vamos a estar de acá a 15 días para ver si sigue ahí o lo tenemos que derivar a otro lado. Nosotros queremos que si están las prótesis se las pongan ahí, porque creo que ahí lo van a encaminar, aunque muy de a poquito. Es adaptarse y él como es jovencito estoy seguro que lo va a poder hacer.
-¿Hoy, como familia, tienen alguna necesidad puntual?
Rodolfo: La gente de acá nos ha dado bastante, nos han donado muchas cosas gracias a Dios, como la gente de nuestro pueblo Rufino, que está entre Córdoba y la provincia de Buenos Aires, casi donde termina Santa Fe. Han venido algunos concejales, yo les dije que por ahora no, pero quizás más adelante podríamos necesitar alguna ayuda importante. Cuando estemos allá en casa será otra cosa, no sé, quizás más adelante llamaremos a algún concejal si hiciera falta pero hoy el alquiler y los gastos del día los pagamos nosotros.
-¿Tienen pensado cuándo podrán volver a su ciudad?
-Rodolfo: No, todavía no tenemos pensado, cuando veamos los días que estemos en Mar del Plata ahí veremos, ya desde esta semana estamos y nos quedamos en Mar del Plata.
-La gente está muy pendiente del caso de Joaquín… -Mariela: nosotros estamos agradecidos de que hayan venido ustedes, estamos bien y contentos, y quiero agradecerles a la gente de acá ya que no conocíamos Balcarce y todo fue muy difícil. Y quiero agregar que el Hospital Municipal de Balcarce como su personal es excelente, la atención fue muy buena. Y a los pueblitos, como Los Pinos, San Agustín, y mucha otra gente nos ha ayudado, eternamente agradecidos. Han venido y nos siguen escribiendo para ver cómo sigue Joaquín y eso es impagable.
-¿Hace mucho que estas en Balcarce?
-Joaquín: Estoy acá hace un año y medio más o menos.
¿Cómo estás de ánimo hoy después de lo que pasó?
-Bien. En el accidente no pienso, trato de olvidarlo. Miro para adelante.
-¿Cómo te preparas para afrontar esta nueva vida?
-Bien. Tranquilo. Estoy seguro que voy a poder. Tengo mucha fe en qué voy a salir adelante.
-¿Cómo imaginas tu futuro?
-Voy día a día, la vida sigue. Estoy vivo y eso es lo que importa.
Fuente: lavanguardia.com
