Evaluación de cultivares de cebada cervecera en campo de productores durante la campaña 2017.

Introducción

La cebada cervecera (Hordeum vulgare) es el cuarto cereal en importancia del mundo después del trigo, maíz y arroz, debido a su amplia adaptación ecológica, a su utilización tanto para alimentación animal como humana, y a la alta calidad de la malta para la fabricación de cerveza. Al ser la principal materia prima de la industria maltera tiene una demanda en constante aumento, sumándose en los últimos años la demanda de grano para exportación como grano forrajero. El sudeste bonaerense en la provincia de Buenos Aires es la zona más importante en producción seguido por el oeste-sudoeste abarcando parte del este pampeano y al irse incrementando la superficie sembrada, el centro-norte de Buenos Aires junto al sur de Santa fe y sudeste de Córdoba empezaron a aportar al resto del área productiva.

De acuerdo al promedio de los últimos cinco años (2013/17), se cultivan aproximadamente 1.10 millones de hectáreas lo que significa una producción de alrededor de 3.90 millones de toneladas por año, con un rendimiento promedio de 3800 kilogramos por hectárea (kg/ha). La campaña 2017 tuvo 900.000 hectáreas sembradas y una producción de 3.6 millones de toneladas con un rendimiento promedio de 4000 kg/ha (MAI 2017).

Al ir incrementándose la superficie sembrada y con ello la importancia del cultivo, la demanda de información también aumentó por parte de asesores y productores. Si bien el Grupo de Mejoramiento de Trigo de la EEA Marcos Juárez anualmente conduce ensayos comparativos de rendimiento de grano de cultivares pertenecientes a la Red Nacional de Cebada Cervecera no se dispone de suficiente información sobre el comportamiento productivo a nivel zonal y en condiciones de manejo de productor. Por lo dicho anteriormente, el objetivo de este trabajo fue evaluar el comportamiento productivo de diferentes cultivares comerciales de cebada cervecera con adaptación a los distintos ambientes de la región, con el fin de generar información descriptiva del panorama varietal actual y su comportamiento productivo. Esta actividad de experimentación está priorizada en los Proyectos Regionales con Enfoque Territorial (PRET) del INTA EEA Marcos Juárez.

Materiales y métodos

Los ensayos fueron conducidos durante la campaña agrícola 2017 en seis localidades: Marcos Juárez, Inriville, Corral de Bustos, Monte Buey y La Carlota en la provincia de Córdoba y Los Molinos en la provincia de Santa Fe. Se evaluaron once variedades comerciales de cebada cervecera (cuadro 1). Los ensayos se sembraron en lotes de trigo con antecesor soja de primera, provenientes de una rotación estabilizada trigo/soja-maíz-soja, a excepción de Marcos Juárez (trigo/maíz-maíz-soja), Corral de Bustos (trigo/soja-maíz) e Inriville (maíz-soja) que presentan otro historial en sus rotaciones. En Corral de Bustos e Inriville se sembró sobre rastrojo de maíz. La siembra se realizó con máquina experimental de parcelas Agrometal, con enganche de tiro, de siete surcos distanciados a 0,20 metros con cono distribuidor. Se utilizó un diseño estadístico Alfa látice con tres repeticiones en Marcos Juárez, Monte Buey, Los Molinos y La Carlota, donde la unidad experimental fueron parcelas de 5 m2 a cosecha. Sobre rastrojo de maíz se realizaron dos repeticiones pero con parcelas de mayor tamaño (Inriville: 10 m2 y Corral de Bustos: 20 m2 ) bajo un diseño en Bloques Completos Aleatorizados. Se utilizó una densidad de siembra de 300 plantas por metro cuadrado. La fecha de siembra de la mayoría de los ensayos fue en el mes de julio (Marcos Juárez el 3/7, Corral de Bustos el 13/7, Monte Buey el 14/7 y Los Molinos el 17/7), a excepción de La Carlota que fue a fin de junio, el 21/6. El manejo del cultivo en todos los casos fue el utilizado por el productor en cada lote. En cuanto a la fertilización de los lotes, en Marcos Juárez se distribuyeron 85 kg/ha de N en forma de UREA al voleo en presiembra más 90 kg/ha de MAP (Fosfato Monoamónico) incorporado en la siembra. En Inriville se aplicó en presiembra al voleo 220 kg/ha de MAP más 200 kg/ha de UREA (92 kg N/ha) y 75 kg/ha de Sulfato de Amonio y en la siembra 90 kg/ha de MAP. En Corral de Bustos, 110 kg/ha de MAP más 70 kg/ha Sulfato de Amonio al voleo en presiembra, 90 kg/ha de MAP incorporado a la siembra y 270 kg/ha de UREA al voleo a fin de julio (124 kg N/ha). En Monte Buey se aplicó en presiembra 360 lts de SolMix (80-20) chorreado y en la siembra 90 kg/ha de MAP. En La Carlota se fertilizó con 270 kg/ha de UREA incorporado en presiembra más 90 kg/ha de MAP en la siembra. En Los Molinos se aplicó en presiembra 395 lts de SolMix (80-20) y en la siembra 90 kg/ha de MAP. En todas las localidades se aplicó fungicida foliar.

La cosecha de grano se realizó mediante una cosechadora experimental automotriz de parcela chica (Wintersteiger). Se analizó la variable rendimiento de grano mediante un ANAVA (análisis de varianza) individual para cada localidad. Luego se realizó un análisis conjunto teniendo en cuenta los efectos de ambiente, cultivar y la interacción ambiente por cultivar. Se decidió realizar un análisis de la interacción genotipo – ambiente aplicando test de estabilidad de Shukla, ya que el uso de esta modalidad de análisis permite una comparación objetiva de los resultados en ensayos multi ambientales con el fin de ajustar una recomendación regional de cultivares (Shukla, 1972). Se utilizó para esto el software estadístico SAS (SAS, 2015).

Resultados

Los cultivos de invierno durante el año agrícola 2017 iniciaron su ciclo con una muy buena disponibilidad de agua en el perfil del suelo implantándose con normalidad. El aporte de lluvias durante el ciclo del cultivo (julio a noviembre) fue moderado (cuadro 2). Cómo se puede apreciar en el cuadro, el patrón pluviométrico fue similar en todas las localidades con un bimestre, octubre y noviembre, con menores precipitaciones a las registradas en la serie histórica pero sin afectar al cultivo por el perfil del suelo recargado en los meses anteriores e incluso en algunas localidades con efecto de la napa cercana. Las temperaturas durante el invierno fueron cálidas hasta la espigazón y con baja ocurrencia de heladas en el invierno y sin heladas tardías que afectaran los órganos florales y reproductivos. Luego siguió un período de temperaturas moderadas a bajas en octubre que favorecieron el llenado de los granos.

En el cuadro 3 se puede visualizar la fecha de floración de las variedades evaluadas. La fecha de floración fue muy pareja entre las variedades y entre las localidades y en una época deseable, a excepción de INTA 7302 que fue la variedad más precoz en todos los ambientes.

Se realizaron análisis de varianza individuales de cada localidad para rendimiento de grano (kg/ha) de las variedades evaluadas. En el cuadro 4 se visualiza en comportamiento de cada variedad en cada ambiente (localidad). Los coeficientes de variación de cada ensayo fueron muy buenos a excepción de La Carlota pero sin mucho aporte a la interacción. Se observan muy buenos rendimientos de grano en todas las localidades.

Luego se realizó un análisis conjunto teniendo en cuenta los efectos de ambiente, cultivar y la interacción ambiente por cultivar. Se decidió realizar un análisis de estabilidad de Shukla para una mejor interpretación de la interacción genotipo – ambiente. Del análisis surge una interacción cultivar por ambiente significativa (p<0,0001) que sugiere diferencias de comportamiento de los cultivares entre los ambientes de evaluación. El promedio general de los ensayos fue de 5138 kg/ha y el test de comparación de medias arrojó una diferencia mínima significativa (LSD al 5%) de 694 kg/ha. De este análisis se destacan las variedades ALICIANA (5863 kg/ha), SCRABBLE (5716 kg/ha), ANDREIA (5449 kg/ha), EXPLORER (5363 kg/ha) y JENNIFER (5208 kg/ha) significativamente por sobre el resto (figura 1) y con muy buena estabilidad. SHAKIRA estuvo en el promedio de los ensayos con 5095 kg/ha y el resto de las variedades estuvieron por debajo del promedio y algunas con cierta inestabilidad.

Teniendo en cuenta los datos de los ensayos en campo de productor de la campaña 2016 y los datos del año 2017, se decidió realizar otro análisis conjunto teniendo en cuenta los efectos de ambiente (localidades y años), cultivar y la interacción ambiente por cultivar. También se decidió realizar un análisis de estabilidad de Shukla para una mejor interpretación de la interacción genotipo – ambiente. Del análisis surge una interacción cultivar por ambiente significativa (p<0,0001) que sugiere diferencias de comportamiento de los cultivares entre los ambientes de evaluación (localidades y años). El promedio general de los ensayos fue de 5124 kg/ha y el test de comparación de medias arrojó una diferencia mínima significativa (LSD al 5%) de 515 kg/ha. En este análisis se destacaron las variedades SCRABBLE (6050 kg/ha), ALICIANA (5673 kg/ha), EXPLORER (5519 kg/ha), ANDREIA (5546 kg/ha) y JENNIFER (5334 kg/ha). El resto de las variedades estuvo por debajo del promedio. TRAVELER e INTA 7302 presentaron cierta inestabilidad junto a SCARLETT que fue la de menor comportamiento en estos ensayos (figura 2). Estos resultados coinciden con ensayos previos (Donaire et al., 2017; Donaire et al., 2016; Salines et al., 2016) en la cual al evaluar el comportamiento de las distintas variedades de cebada cervecera en varios ambientes productivos (localidades y años), SCRABBLE, ALICIANA y ANDREIA sobresalen por sobre el resto y con buena estabilidad productiva.

En el cuadro 5 se visualiza el perfil sanitario de las variedades de cebada cervecera evaluadas, aunque vale aclarar que escaldadura (Rhynchosporium secalis) no se observó en los ensayos pero son de mucha importancia en la provincia de Buenos Aires. Otra enfermedad importante es el salpicado necrótico (Ramularia collo-cygni) y ningún material evaluado aquí tiene resistencia a la enfermedad (Campos, P. comunicación personal).

 

Conclusiones

La generación de información sobre el comportamiento productivo de variedades de cebada cervecera en la región, es de suma importancia para el conocimiento y la transferencia de tecnología en el manejo del cultivo a ser adoptado por técnicos, asesores y productores.

Agradecimientos

Los autores desean agradecer a los productores Norberto Ballario y Ramón García (Inriville), Gustavo y Nelson Romagnoli y Mariano Giordano (Monte Buey), Pablo Boixadera (Los Molinos), Marcelo Tombetta (Corral de Bustos) y a Oscar y Marcelo Pico (La Carlota) por la colaboración prestada en la conducción de los ensayos.

 

Fuente: INTA por Guillermo Manuel Donaire, José Héctor Salines, Jorge Alberto Fraschina, Enrique Javier Alberione, Carlos Tomás Bainotti, Nicolás Salines, Dionisio Tomás Gómez, María Belén Conde