Se levantó el paro de fleteros, que realizaba el Sindicato Único de Fleteros de la República Argentina (Siunfletra), desde ayer lunes, en más de 20 puntos estratégicos de la Argentina, el paro provocó pérdidas millonarias en el sector agroexportador. La situación afectó el normal funcionamiento de los puertos cerealeros del Gran Rosario y del polo exportador de la provincia de Buenos Aires, a raíz de la ralentización de la llegada de camiones a las terminales.
La medida de fuerza fue en reclamo de una actualización en las tarifas, y por un pedido para que Siunfletra se integre una mesa de negociaciones de la que participan las 4 cámaras que nuclean a los transportistas mantienen, en el ámbito del ministerio de Transporte de la Nación. con el Gobierno.
Fuentes del sector agroexportador indicaron que el paro agudizó la problemática en las principales terminales cerealeras, donde “el panorama es desolador” por la drástica merma en la llegada de camiones. “No hay arribos de camiones, por lo que los puertos no van a descargar (y cargar mercadería)”. Indicaron que con esta medida “la Argentina retrasa ingresos de divisas equivalentes a 100 millones de dólares por día por paros en puertos”.
Respeto. El secretario general de Siunfletra, Mario Pereyra, manifestó que, como la tarifa que manejan es orientativa, los dadores de carga no la respetan. “Hacen que el transporte viaje un 40% o 50% debajo de esa tarifa que firman las cámaras empresariales. Nosotros buscamos que se respete la tarifa piso, porque al cobrar ese porcentaje abajo lo primero que hacemos es no pagar el IVA, lo segundo que hacemos es que el convenio colectivo de trabajo de nuestros choferes no lo pagamos, no compramos insumos, porque además se agudizó todo esto. Por la sequía en el campo no hay trabajo, no hay exportación, no hay tarifa”, dijo. La decisión de encabezar el paro fue a través de un plenario, donde se pactó que hoy se iba a hacer la medida de fuerza”, precisó.
Las cámaras empresariales que menciona Pereyra son Confederación Argentina del Transporte Automotor de Cargas (Catac), la Federación Argentina de Entidades de Transporte y Logística (Faetyl), la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) y la Federación de Transportistas Argentinos (Fetra). Estas entidades son las que gestionaron una reunión para pactar un aumento sobre la “tarifa orientativa”.
El Siunfletra no integra la mesa de negociaciones que mantienen las mencionadas 4 cámaras con el Gobierno. Según confirmaron desde el Ministerio de Transporte el sindicato “no puede participar”, porque no “forma parte de ninguna cámara” y no está reconocido como gremio. El viernes pasado, las cámaras mantuvieron un encuentro con autoridades de la cartera que encabeza Diego Giuliano, para conformar una mesa de trabajo, a través de la secretaría de Gestión y Planificación.
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Una semana. Los ejes principales de esa mesa serán: la implementación de medidas tendientes a erradicar situaciones de abuso de posición dominante de mercado, las distorsiones tarifarias, la propuesta de políticas tendientes a la protección de las fuentes de trabajo en el marco de las economías regionales, y la gestión y evaluación de instrumentos de fomento y compensación para la actividad a fin de reducir costos regulatorios. El primer encuentro será el martes 2 de mayo, de la próxima semana.
Pereyra indicó que con la medida de fuerza buscan que se respete la tarifa que firman las cámaras empresariales. Contó que, el viernes y el sábado, se contactaron con los ministerios de Transporte y de Trabajo, para encontrar una solución. Dijo que desde que comenzó el paro no han tenido ningún tipo de comunicación con autoridades nacionales.
Señaló que las cámaras empresariales no les permiten integrar la mesa de trabajo, pese a que, en diciembre del 2021, regularizaron el sindicato y lo pusieron “en condiciones para sentarse a negociar” con el Gobierno. “A las cámaras no les interesa que nosotros estemos en esa mesa y entonces presionan al Ministerio de Transporte para que no estemos, porque nosotros vamos a hacer respetar lo que se firma”, dijo
Desleal. El sindicato sostiene que “se genera una competencia desleal en el negocio cuando ellos (las cámaras) firman algo y esto posibilita a que a los fleteros se les descuente 40% sobre la tarifa pactada”. A modo de ejemplo, un viaje de menos de 100 km debería estar en 85.000 pesos, pero un transportista lo cobra a $40.000.
En el sindicato aseguraron que “hay un círculo vicioso porque no se respetan las tarifas pactadas”. Denunció también que “el dador de carga saca un cuadro tarifario donde les señalan el precio por el flete, menos un 40%”.
Agregaron que “todo el transporte que anda en la ruta se rige sobre esa tarifa que las cámaras firman y aceptan que se le baje un 40% o 50%, abajo de la tarifa que le llega al fletero; queda expuesta en la carta de porte de la mercadería”, explicó.
Actualización. En tanto, desde Fadeeac aclararon que la última actualización se hizo el 16 de marzo pasado y fue del 22% en la tarifa nacional, mientras que el 31 de marzo último se acordó la actualización para la tarifa de la provincia de Buenos Aires.
Roberto Rivero, director ejecutivo de Fadeeac, señaló que “no convocan ni apoyan los cortes y las distintas medidas de fuerza que se realizan en diferentes puntos del país, por reclamos relacionados con la recomposición y cumplimiento de la tarifa de referencia, la falta de playas y derechos laborales y en cambios en la carta de porte. Estamos convencidos de que la única vía de solución a los problemas que padece el sector es a través del diálogo y el trabajo conjunto”, enfatizó.
Puertos. Por su parte, la Cámara de Puertos Privados Comerciales (CPPC) expresó su preocupación por la medida de fuerza de Siunfletra. La entidad, que agrupa a los puertos que tienen varias agroexportadoras ubicadas a la vera del Paraná, en el Gran Rosario, dijo que el sindicato se encuentra “interrumpiendo la libre circulación en las principales rutas del país y accesos a los puertos”. También que “está afectando principalmente a las cargas, impidiendo la llegada de camiones a las respectivas instalaciones portuarias, generando tanto en los puertos del Gran Rosario como en los puertos de la provincia de Buenos Aires innumerables inconvenientes tanto para los transportistas como para el normal funcionamiento de la actividad portuaria”.
Y agregó: “Una vez más, los puertos se ven afectados por conflictos que no tienen relación directa con la actividad, pero que toman medidas perjudicando al sector. En el momento complicado de sequía que está atravesando el país, la necesidad de ingreso de divisas y el cumplimiento de los contratos con el exterior, es imperioso intentar resolver estos problemas por la vía del diálogo y los canales institucionales, y no afectando el desarrollo normal de la actividad. Necesitamos poder trabajar sin estas constantes interrupciones”, recalcó la CPPC.
