Investigadores desarrollan una herramienta clave para evaluar una enfermedad emergente en pecán
Un grupo de especialistas del Instituto de Patología Vegetal (IPAVE) del INTA, en colaboración con la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Catamarca (UNCA), diseñó una escala diagramática para facilitar el diagnóstico de la mancha negra del pecán, una enfermedad fúngica que está comenzando a preocupar en distintas regiones productoras.
Durante 2021, en la provincia de Catamarca se detectaron síntomas inusuales en cultivos de pecán, caracterizados por lesiones necróticas oscuras e irregulares en hojas y frutos. La alta presencia de estos signos motivó a investigadores de la UNCA a analizar muestras en laboratorio, lo que permitió asociarlos con la presencia del hongo Alternaria sp., causante de la mancha negra. Como respuesta, se puso en marcha el desarrollo de una herramienta visual que permite cuantificar el daño con mayor precisión.
La mancha negra del pecán ha sido reportada en países como China y Sudáfrica, donde puede provocar efectos severos bajo condiciones favorables para su desarrollo: defoliación, caída prematura de frutos y debilitamiento progresivo de los árboles, reduciendo su rendimiento y productividad. Según Ignacio Cazón, investigador del IPAVE, “es fundamental contar con instrumentos que permitan medir el impacto de esta enfermedad en nuestro sistema productivo, especialmente porque su presencia es relativamente reciente”.
Te puede interesar
- Pronóstico de lluvias hasta el 16 de junio
- Caputo anticipa el fin de las retenciones en un año y defiende alivios fiscales al campo
-
Récord en la producción de legumbres en Argentina impulsado por una siembra histórica
- Aumento confirmado: cuánto cobrarán los trabajadores rurales en junio 2025 con la nueva escala salarial
- Sin retenciones, la exportación de maíz y sorgo podría llegar a USD 10.000 millones en 2026/27
- Reclamo a la UE por calificación de la Argentina bajo normativa unilateral europea sobre deforestación
La herramienta elaborada consiste en una escala diagramática que permite estimar visualmente el nivel de severidad con que el patógeno afecta a los órganos de la planta. “Estas escalas representan gráficamente diferentes grados de daño, generalmente en imágenes de hojas enfermas, lo que facilita al evaluador identificar y cuantificar la enfermedad de forma más objetiva y uniforme”, explicó Cazón.
El proceso de validación de esta escala incluyó la participación de 34 evaluadores, entre docentes, estudiantes de la UNCA e investigadores del IPAVE. En una primera instancia, estimaron la severidad de hojas enfermas sin ninguna referencia. Luego, repitieron el ejercicio utilizando la escala como guía. Los resultados mostraron una mejora significativa en la precisión de las estimaciones gracias a esta herramienta visual.
Además, el equipo incorporó imágenes representativas en la plataforma TraineR2, una aplicación gratuita creada en Brasil en 2023 que permite entrenar evaluadores en la estimación visual de enfermedades.
Para el profesor Nelson Bernardi Lima, de la UNCA, este trabajo es un ejemplo claro del valor de la cooperación interinstitucional. “Poder acercar este tipo de herramientas a los técnicos y productores es esencial para mejorar el manejo del cultivo y responder con mayor agilidad a los desafíos sanitarios del sector”, afirmó.
El cultivo de pecán en Argentina viene mostrando un crecimiento sostenido. De acuerdo con el Clúster Argentino del Pecán, existen unas 10.000 hectáreas plantadas en el país, con una producción anual que ronda las 2.000 toneladas. Catamarca, en particular, se posiciona como la segunda provincia productora, después de Entre Ríos, con aproximadamente 460 hectáreas dedicadas a esta actividad y un fuerte potencial de expansión.
Fuente: INTA Informa
