Tensión en la negociación salarial de trabajadores rurales
El sindicato UATRE de la provincia de Entre Ríos expresó su preocupación ante la falta de avances en la mesa paritaria de la Comisión de Actividades Rurales (CAR3), tras la última reunión celebrada el lunes 21 de abril en la ciudad de Concordia. En ese encuentro se discutieron las condiciones laborales y salariales de trabajadores de diversas actividades rurales, como las forestales, arroceras, hortícolas, viveristas, florícolas, algodoneras, nueces, melones y sandías, esquila de ovinos, almacenamiento de granos, arreo de ganado y remates en feria.
Según informaron desde el gremio, los representantes patronales sorprendieron al no proponer ningún incremento salarial, argumentando que, a su entender, los sueldos actuales superan la inflación. Esta postura fue calificada por los delegados sindicales como “una desfachatez insólita”.
Frente a esto, los paritarios gremiales —Edgardo Maier, Daniel Galeano, Sebastián Cañete y Mario López— reclamaron un ajuste del 4% correspondiente a marzo y un 3% adicional para abril. Esta solicitud derivó en la suspensión inmediata del encuentro, que fue pospuesto hasta el 15 de mayo.
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Desde UATRE manifestaron su malestar por lo que consideran una falta de acompañamiento del Estado en estas instancias, apuntando directamente a la Secretaría de Trabajo, a quien acusan de desentenderse del rol de garante en el desarrollo de paritarias justas.
“Los salarios de nuestros compañeros están muy por debajo de la canasta básica. No estamos pidiendo nada desproporcionado, sino simplemente lo que corresponde para no seguir perdiendo poder adquisitivo”, indicaron en un comunicado.
Según el último informe del INDEC, el costo de la canasta básica ascendió a $1.024.435 en abril, cifra que representa el umbral para que una familia no sea considerada pobre. En este contexto, desde el gremio advierten que, al no actualizar los salarios acorde al índice de precios, el deterioro de los ingresos es cada vez mayor.
“No hay producción sin trabajadores. La dignidad no puede ponerse en pausa. Exigimos una negociación seria, con aumentos mensuales que al menos se ajusten a la inflación medida por el IPC”, concluyeron.