Progreso y sostenibilidad: un tambo que es modelo en Entre Ríos
El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) ha implementado diversas estrategias para fortalecer la industria láctea en Nogoyá, centrándose en la asistencia técnica y la promoción de buenas prácticas de manufactura. A través de un enfoque sistemático, el INTA ha buscado mejorar los controles sanitarios en las actividades de elaboración y comercialización de productos lácteos, asegurando así la calidad y seguridad alimentaria.
Una de las acciones clave ha sido la realización de controles sanitarios rigurosos, que incluyen análisis detallados de agua, leche y quesos. Estos análisis son esenciales para detectar posibles contaminantes que podrían afectar tanto a la salud del consumidor como a la reputación de los productores locales. Mediante esta asistencia técnica, el INTA ha proporcionado a los tamberos las herramientas necesarias para cumplir con las normativas del sector, minimizando riesgos y garantizando un producto de calidad.
Además, el INTA ha trabajado en la implementación de buenas prácticas de manufactura, promoviendo estándares que favorecen la higiene y el manejo adecuado de los productos lácteos. La capacitación constante ha sido un pilar fundamental de esta estrategia, con el objetivo de fomentar la formalización de la comercialización y mejorar la infraestructura de los tambos. La Jefa de la Agencia del INTA de Nogoyá, Silvina Butarelli, ha destacado en diversas ocasiones la importancia de estas mejoras, subrayando que la infraestructura adecuada no solo contribuye a la eficiencia de producción, sino que también aumenta la confianza del consumidor en los productos locales.
Los testimonios de Butarelli reflejan los avances logrados, enfatizando que la colaboración entre los productores y el INTA ha llevado a resultados tangibles, permitiendo a los tamberos adaptarse a un mercado cada vez más exigente. A través de estas iniciativas, se busca no solo mejorar la competitividad de los lácteos de Nogoyá, sino también fortalecer la seguridad y calidad alimentaria en la región.
Innovación y sostenibilidad en el tambo de la familia Ormachea
El tambo de la familia Ormachea, establecido en 2013, ha recorrido un camino significativo hacia la innovación y la sostenibilidad en la industria láctea. Desde sus inicios, esta familia ha demostrado un firme compromiso con la producción de leche de alta calidad, esforzándose por integrar prácticas que no sólo optimicen su rendimiento, sino que también sean respetuosas con el medio ambiente.
Uno de los aspectos más destacados en su trayectoria ha sido la mejora de la alimentación y genética del ganado. A través de programas de manejo nutricional y la incorporación de razas de alta producción, han logrado incrementar la eficiencia en la producción láctea. Esto no sólo ha permitido obtener un mayor volumen de leche, sino que también ha reducido el impacto ambiental, dado que una alimentación óptima conlleva a un uso más eficiente de los recursos.
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Además, la familia Ormachea ha implementado tecnologías innovadoras como el robot de ordeño, facilitando así una recolección de leche más eficiente y menos invasiva para el ganado. Esta tecnología no solo mejora la calidad de vida de las vacas al reducir el estrés asociado con el ordeño, sino que también proporciona un monitoreo continuo y preciso de la salud del ganado. Asimismo, la instalación de paneles solares en sus instalaciones les ha permitido diversificar sus fuentes de energía, contribuyendo a la sostenibilidad del tambo y reduciendo la dependencia de un suministro eléctrico que puede ser inestable en la región.
El compromiso de la familia Ormachea con la actividad lechera va más allá de la producción. Han enfrentado y superado desafíos asociados con la inestabilidad del suministro eléctrico, buscando soluciones creativas que les permitan mantener una operación constante y eficiente. Esto les ha permitido ser un ejemplo de cómo la innovación y la sostenibilidad pueden ir de la mano en la industria láctea.
Perspectivas futuras y compromiso con el territorio
La familia Ormachea, asentada en la región de Nogoyá, enfrenta una situación en la que la migración urbana está ganando terreno. Este fenómeno, motivado por las oportunidades laborales y educativas en las ciudades, presenta desafíos significativos para las comunidades rurales que buscan mantener su forma de vida. A pesar de esta tendencia, la familia Ormachea ha mostrado un firme compromiso con su entorno rural, tomando medidas para asegurar un futuro viable para su tambo.
La integración de tecnología en los procesos de producción lechera representa una de las estrategias más relevantes para la familia. Gracias al respaldo del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), han podido implementar innovaciones que mejoran la eficiencia y la calidad de la producción. Estos avances no solo les han permitido mantenerse competitivos en un mercado en constante cambio, sino que también han contribuido a establecer un modelo que une la tradición con prácticas modernas.
La comunicación efectiva con los consumidores y la notoriedad de su producto son pasos necesarios para seguir prosperando. En esta línea, las familias que trabajaban en el tambo han comenzado a utilizar plataformas digitales para promocionar sus productos y compartir su historia. El apoyo del INTA es fundamental para este propósito, proporcionando acceso a herramientas que permiten a los productores rurales interactuar con un mercado más amplio.
Finalmente, el modelo de la familia Ormachea ilustra cómo la tradición y la innovación pueden coexistir en armonía, asegurando una producción lechera sostenible en la región. Su compromiso con el territorio y la búsqueda de soluciones efectivas serán cruciales para superar los retos del futuro, permitiendo que la producción lechera no solo sobreviva, sino que florezca en un contexto cada vez más urbano. Este enfoque representa un faro de esperanza para otras familias en situaciones similares que desean permanecer vinculadas a sus raíces y a su tierra.
