El informe situacional de sequía emitido el 1 de enero de este año por la Dirección Nacional de Riesgo y Emergencia Agropecuaria indicó 175 millones de has en sequía en Argentina, de las cuales 29 millones de has se encuentran en categoría severa –indicadas con color rojo en el mapa.
Según el informe, la zona núcleo y la región central de nuestro país atraviesan al momento el año más seco en más de 62 años de registros pluviométricos. Los índices de humedad de suelo muestran almacenajes ínfimos y no alcanzan a cubrir los requerimientos de los cultivos y pastizales, siendo las zonas núcleo, Central y Litoral Sur las más críticas, con los valores de almacenaje mínimos históricos para la fecha.
Para la Provincia de Entre Ríos, la sequía severa afecta 8 departamentos: Islas del Ibicuy, Gualeguaychú, Gualeguay, Victoria, Diamante, Tala, Nogoyá y Paraná, explica la Ana Wingeyer, especialista del INTA Paraná.
“Si bien se recibieron precipitaciones en diciembre y enero, éstas no alcanzan para revertir las condiciones de sequía. Las altas temperaturas de diciembre acentúan la demanda hídrica de la atmósfera y la pérdida de agua del suelo” -continúa.
La comparación de las precipitaciones recibidas entre julio y diciembre de 2022 respecto al promedio permite estimar el índice estandarizado de precipitaciones de los últimos 6 meses. Los mapas resultantes indicaron que el 100% de la superficie provincial presentó una reducción de las precipitaciones, resultando en sequía incipiente a extrema.
Si se acorta la ventana de tiempo a los últimos 3 meses, se observa que las precipitaciones de diciembre en el sur de la provincia no fueron suficientes para revertir la situación, y la falta de lluvias en el norte de la provincia resultaron en un incremento en la severidad de la sequía.
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Respecto a la humedad del suelo, los índices muestran amplias zonas del país donde la humedad se encuentra por debajo de los requisitos hídricos de cultivos y pasturas.
Los valores son excepcionalmente bajos en el centro del país, pero con fuertes caídas de la humedad disponible en el Litoral en el último mes. La Bolsa de Cereales de Entre Ríos a través del SIBER (Sistema Integrado para el seguimiento y estimación de la producción de cereales y oleaginosas en el territorio entrerriano) publica semanalmente el mapa provincial de precipitaciones y de estado de humedad del suelo.
“En nuestra provincia, la humedad del suelo es insuficiente para la demanda de los maíces tempranos y soja de primera. Los maíces tardíos y sojas de segunda tienen una situación de humedad de suelo de reservas escasas a sequía. Y la siembra de maíz tardío y soja de segunda se suspendió quedando superficie sin sembrar” –explica Ana Wingeyer.
En relación a la ganadería, también hay un fuerte impacto por la baja productividad de las praderas y campos naturales. Además, la poca certeza de la situación de humedad de suelo de las islas, asociada a la bajante histórica del Río Paraná, reduce la perspectiva de producción de forraje.
Pronóstico y perspectivas
A mediano plazo, los informes climáticos basados en las temperaturas oceánicas de superficie en la región ecuatorial del Centro de Predicciones Climáticas, indican una transición gradual en el fenómeno Niña hacia condiciones neutrales. El debilitamiento de las condiciones de sequía se espera para los meses de marzo y abril, seguido de condiciones neutrales hasta agosto. Esta perspectiva climática, sugiere una campaña de fina 2023 con mejores condiciones de humedad, y un recupero gradual de los pastizales.
Fuente: INTA por Ana Beatriz Wingeyer, Bernardita Zeballos Bianchi
