Sin agenda oficial durante toda la jornada del pasado viernes, atravesado por el alegato de la vicepresidenta en la causa Vialidad, el Presidente lo siguió en su totalidad desde la Casa Rosada, acompañado solo por su amigo y secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello.
Luego, les expresó a sus colaboradores satisfacción con la declaración, en particular por un pasaje que coincidió con su propia presentación como testigo en la misma causa. Sin embargo, en su entorno deslizaron quejas sobre la excesiva centralidad que le está dando CFK a la agenda judicial, un tema alejado de las preocupaciones de los ciudadanos.
“Muy atinado”. Aunque distanciado de CFK, el Presidente expresó a los propios conformidad con sus dichos. “Todo lo que dijo Cristina le pareció muy atinado”, dijeron funcionarios del entorno del jefe de Estado que escucharon algunos de sus comentarios. Además, consideraron que el mensaje fue “mucho más técnico que político”.
En Balcarce 50 destacaron, en particular, el pasaje donde la Vicepresidenta denunció la parcialidad de la Justicia con respecto a las responsabilidades de otros funcionarios durante la supuesta “asociación ilícita” para desviar fondos de obra pública a manos del empresario Lázaro Báez.
Especialmente respecto del rol de los jefes de Gabinete durante el período investigado. “Si me dan a elegir entre esta (Constitución) y la del 53 que hizo Juan Bautista Alberti, me quedo con la de Alberdi”, expresó CFK al referirse a las responsabilidades del jefe de Gabinete según la Constitución, y recordó que es el ministro coordinador quien se ocupa del envío del Presupuesto al Congreso.
En el entorno del Presidente, recordaron que ese tramo coincide con el planteo que el primer mandatario hizo como testigo, en la misma causa, el 15 de febrero, respecto de su propio papel en el gobierno de Cristina Kirchner, que también cumplieron Sergio Massa, Aníbal Fernández, Juan Manuel Abal Medina y Jorge Capitanich.
Premeditación. “Lo de la asociación ilícita es una barbaridad. El Jefe de Gabinete es central en las partidas, y lo dejan afuera del juicio, algo que no tiene ni pies ni cabeza y está hecho premeditadamente”, opinó un altísimo funcionario, que consideró el argumento como “central”.
De todas formas, más allá de las coincidencias, el Presidente no había publicado, al cierre de esta nota, un mensaje de apoyo público a la Vicepresidenta. A pesar de que ayer en la Casa Rosada habían adelantado que Alberto Fernández expresaría un respaldo a CFK en las redes sociales.
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Morochas. Quien sí se manifestó fue la portavoz, Gabriela Cerruti. Ella publicó un video que la muestra en la Casa de Gobierno frente a una pantalla viendo la declaración con el epígrafe “Perseguida por mujer y peronista” y, de fondo, la canción de la banda de rock argentino Los caballeros de la quema “Avanti morocha”.
Tras a escuchar a Cristina Kirchner, el primer mandatario recibió a dos de los funcionarios de su máxima confianza: el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, que hasta hace pocos meses se desempeñaba como su Jefe de Asesores y el titular de la AFI, Agustín Rossi, con quien habla a diario.
Agendas. Lo sucedió este viernes fue, en cierto punto, una continuación de lo acontecido políticamente el jueves, también atravesado por los temas vinculados con la Justicia. Ese día se realizó el recinto del Senado el debate que CFK impuso, a pesar del fuerte descontento que mostró la oposición, para debatir sobre “tablas” la ampliación de la Corte Suprema de 5 a 15 miembros. Finalmente, con acuerdo de senadores disidentes, pero ocasionalmente aliados, el Frente de Todos (FdT) logró la media sanción del proyecto, que ahora pasará a Diputados, donde la aprobación está en duda.
Como se preveía, la agenda judicial que impulsan Cristina Kirchner y La Cámpora, que a través de sus redes buscaron dar centralidad a la causa Vialidad, fue clave para el Gobierno. En el sector moderado del FdT, si bien dijeron apoyar la defensa de CFK, mostraron su preocupación por la excesiva atención que le da el oficialismo a ese tema, desatendiendo los problemas que realmente les importan a los votantes, según la mayoría de las encuestas donde, además, los dirigentes del FdT mantienen altos niveles de imagen negativa.
