El expresidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, opinó que, pese a la suba de las retenciones, “no hay clima” de protesta en el campo. Además, sostuvo que el incremento de los derechos de exportación, de 31 a 33% para la harina y el aceite de soja, es un “manotazo justificado”.
“Este 2% no es un clima de la (resolución) 125. No es un manotazo confiscatorio de todos los rubros a todos los productores. Pero cuando se necesitan recursos, hay todo un debate de dónde salen. Está bien que le saquen el 2% a las aceiteras. Es un manotazo justificado”, señaló Buzzi a LT9 Radio Brigadier López de la ciudad de Santa Fe.
Buzzi, quien presidía la FAA en marzo de 2008 cuando se inició el conflicto por la resolución 125, que imponía retenciones móviles a la exportación de granos, apoyó el Fondo Estabilizador del Trigo anunciado por el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez.
Ese fondo, que se solventará con la suba de las retenciones, busca subsidiar la harina que llega a los panaderos y estos convierten en pan, de manera que vendan el producto a los valores que tenían en febrero, antes de la suba internacional del trigo, a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania.
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Para Buzzi, si alguien protesta por las retenciones a la harina y el aceite de soja “van a defender la rentabilidad de siete grandes empresas”, ya que la medida “no debería impactar en los productores, porque a ellos ya le sacan el 33% de retenciones”, dijo.
“Se quedan con el 2% de rentabilidad y hacen sus negocios. Estas empresas, cuando llega el gran flujo de venta de granos de los productores, se cartelizan y más de una vez no pagan el precio del valor internacional, multiplicado por el tipo de cambio”. Y agregó que “durante más de 30 años, desde los ‘90, las aceiteras multinacionales, hacen los verdaderos negocios de la harina y el aceite de soja”.
Finalmente recordó que “en los ‘90 había 3 puntos diferenciales entre el poroto y el producto. (El expresidente, Mauricio) Macri le sacó ese diferencial, Alberto (Fernández) le restituyó 2 puntos, y ahora, en una situación crítica, lo que se hace es poner en la misma proporción el poroto de soja con los derivados. Son US$400 millones de rentabilidad de un puñado de empresas”, remarcó Buzzi.