Nueva semana positiva para los precios de los granos en el mercado estadounidense, donde el tiempo húmedo mantiene bajo riesgo la siembra de granos gruesos. En Chicago las mejoras superaron el 5,5% para el maíz y la soja, y el 2,6% para el trigo. En Kansas el cereal acortó la brecha con Chicago al cerrar con subas de hasta el 7%. Si bien el clima logró cubrir todos los fundamentos bajistas que inundaban el mercado tres semanas atrás, Trump se encargó el jueves de volver a sembrar incertidumbre con una posible nueva guerra comercial, ahora con México. En el nivel local hubo subas generales, que mejoraron las perspectivas también para el ciclo 2019/2020.
Indicadores exógenos que impactan sobre los precios
Viernes 31 | Viernes 24 | Diferencia en % | |
Petróleo | 53,50 | 58,63 | -8,75 |
Dólar/Euro | 1,1169 | 1,1208 | -0,35 |
Real/Dólar | 3,9220 | 4,0160 | -2,34 |
Peso/Dólar* | 44,56 | 44,62 | -0,13 |
* Tipo de cambio Comprador (cotización divisa) del Banco Nación.
SOJA
El balance de la semana fue positivo para los precios de la soja argentina, en línea con las subas externas. La transición de las ofertas fue de 10.100 a 10.400 pesos por tonelada disponible para la zona del Gran Rosario y de 225 a 235 dólares para los puertos de Bahía Blanca y de Necochea.
Para el viernes el FAS teórico de la soja fue calculado por la Secretaría de Agroindustria de la Nación en $ 11.197, mientras que para el lunes fue fijado en $ 11.110. En el cierre de semana, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) relevó el FAS teórico de la soja para la industria aceitera exportadora en 10.953 pesos por tonelada. El valor FOB en los puertos argentinos para los embarques en junio creció de 330 a 347 dólares por tonelada.
La mejora también comprendió a la soja de la próxima cosecha, dado que las propuestasde los compradores crecieron de 240 a 245 dólares por tonelada con entrega en mayo sobre el Gran Rosario. El Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) reflejó, asimismo, un saldo semanal positivo para la oleaginosa. En efecto, los ajustes de las posiciones julio y noviembre subieron de 234,70 a 241,10 y de 244,20 a 250,80 dólares por tonelada. El contrato mayo aumentó de 240,80 a 247 dólares por tonelada.
En su informe sobre carga de buques programada, la BCR indicó que entre el 29 de mayo y el 28 de junio deben salir desde las terminales del Gran Rosario 182.700 toneladas de poroto de soja, 1.926.599 toneladas de harina y 423.556 toneladas de aceite; desde Bahía Blanca, 237.000 toneladas de poroto, 55.000 toneladas de harina y 10.500 toneladas de aceite; desde Necochea, 223.727 toneladas de poroto, 15.400 toneladas de harina y 30.000 toneladas de aceite, y desde otros puertos, 45.000 toneladas de poroto y 8000 toneladas de harina.
Acerca de los cultivos, el jueves la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) relevó el avance de la cosecha de soja sobre el 90,7% del área apta, con un rinde nacional que, si bien cayó a 34,5 quintales por hectárea, aún se mantiene por encima al récord previo. “Faltan recolectar 1,5 millones de hectáreas para cerrar la campaña, con el 55% de dicha superficie afectada por inundaciones en el NEA y en el noroeste de Santa Fe. Bajo este escenario mantenemos la proyección de producción en 56 millones de toneladas”, dijo la entidad.
Por tercera semana consecutiva, los precios de la soja cerraron en alza en la Bolsa de Chicago, donde los contratos julio y agosto sumaron un 5,79 y un 5,74%, al pasar de 304,88 a 322,52 y de 307,36 a 325 dólares por tonelada. Como en las semanas precedentes, el dato alcista excluyente fue el clima que, por resultar extremadamente húmedo, acentuó el atraso de las siembras sobre las Grandes Planicies y sobre el Medio Oeste de los Estados Unidos.
En ese sentido, tras el feriado del lunes el USDA relevó el martes el progreso de la siembra de soja sobre el 29% de la superficie prevista, frente al 19% de la semana pasada; al 74% de igual momento de 2018; al 66% promedio de las últimas cuatro campañas, y al 31% previsto por los operadores, dentro de un rango posible que fue del 24 al 39 por ciento. Añadió que emergió el 11% de las plantas, contra el 5% de la semana pasada; el 44% de igual momento de 2018, y el 35% promedio. Illinois, que es el principal Estado productor de soja, sólo implantó el 14% de sus suelos agrícolas con soja, muy lejos del 90% sembrado a igual fecha de 2018; del 62% de 2017; del 72% de 2016, y del 69% de 2015. En vista del informe oficial de lunes, los operadores estimaron el viernes que la siembra ha de haber avanzado sobre el 36/39%.
Vale tener en cuenta que el viernes y hoy sábado el tiempo fue mayormente seco en los principales Estados productores de granos gruesos, por lo que no habría que descartar que el lunes el USDA muestre un progreso más alentador que el manejado por los operadores. Claro está que ese avance de las siembras con pocas horas de tiempo seco sólo podrá concretarse sobre campos que lograron evitar los anegamientos.
Hoy que el clima domina la escena favoreciendo la suba de las cotizaciones por la posibilidad de que se siembre menos y que, por ende, se produzca menos soja, parece de mal gusto volver sobre los múltiples fundamentos bajistas que subsisten en el mercado. Pero, como de lo que se trata es de poner todas las cartas arriba de la mesa para lograr una toma de decisiones lo más atinada posible, resulta conveniente no perder de vista que las existencias estadounidenses de soja continúan siendo récord; que la guerra comercialentre Estados Unidos y China está lejos de firmar la paz; que la peste porcina africana sigue extendiéndose, y que la oferta sudamericana es muy abundante.
Como señalamos anteriormente, para el fin de semana se prevén pocas lluvias sobre las principales zonas productoras de granos gruesos de los Estados Unidos, por lo que quienes logren entrar con las máquinas a los campos intentarán sacar el mayor provecho posible de la “ventanilla” de buen tiempo. Vale tener en cuenta que la soja aún cuenta con tiempo para completar la siembra, más allá de que cuanto más tarde se cumpla con la tarea más riesgo habrá de rindes menores y de un período de floración coincidiendo las eventuales elevadas marcas térmicas del verano.
Por último, neutral resultó el informe semanal sobre las exportaciones de los Estados Unidos, dado que el viernes el USDA relevó ventas por 455.700 toneladas de poroto de soja 2018/2019, por debajo de las 535.800 toneladas del reporte anterior, pero levemente por encima del máximo previsto por el mercado, en un rango que fue de 250.000 a 450.000 toneladas. Las operaciones con grano 2019/2020 totalizaron sólo 22.000 toneladas, contra las 5100 toneladas de la semana pasada y frente a un rango calculado por los privados entre 0 y 200.000 toneladas.
MAÍZ
Positivo resultó el balance de la semana para los precios domésticos del maíz. Las ofertas de los exportadores crecieron de 6800 a 7000 pesos por tonelada para la zona del Gran Rosario; de 150 a 155 dólares para Bahía Blanca, y de 140 a 150 dólares para Necochea.
Para el viernes el FAS teórico del maíz fue calculado por Agroindustria en $ 6723, mientras que para el lunes fue fijado en 6641 pesos. Las ofertas de los consumos relevadas por la BCBA se ubicaron entre 5850 y 6300 pesos por tonelada, según condición, calidad, procedencia y forma de pago. El valor FOB en los puertos argentinos para los embarques en junio creció de 169 a 179 dólares por tonelada.
La tónica positiva favoreció al maíz de la próxima cosecha, dado que las propuestas de los compradores subió de 150 a 155 dólares por tonelada para las descargas entre marzo y mayo sobre el Gran Rosario, donde el miércoles se llevaron a ofrecer 160 dólares por tonelada. También en el Matba se reflejaron las mejoras para el cereal. En efecto, los ajustes de las posiciones julio y septiembre crecieron de 139 a 149 y de 143 a 151,50 dólarespor tonelada. El contrato abril, en tanto, aumentó de 150,50 a 156 dólares por tonelada.
En su informe sobre carga de buques programada, la BCR indicó que entre el 29 de mayo y el 28 de junio deben salir desde el Gran Rosario 1.677.160 toneladas de maíz; desde Bahía Blanca, 792.822 toneladas, y desde Necochea, 36.000 toneladas.
Respecto de los cultivos, el jueves la BCBA relevó el avance de la cosecha de maíz para grano comercial sobre el 37,4% del área apta, mientras que el rindo promedio fue reportado en 94,8 quintales por hectárea, por encima de las expectativas iniciales en los planteos tempranos y tardíos. “Frente a este panorama mantenemos la actual proyección de producción de 48 millones de toneladas”, dijo la entidad. Añadió que gran parte de los lotes aún en pie se encuentran en madurez fisiológica, a la espera de su cosecha. “Durante la última semana las labores se concentraron en Santa Fe, Entre Ríos, Córdoba y en Buenos Aires”.
Por tercera semana consecutiva, el maíz, motor del resto de las ganancias de los granos, cerró con saldo positivo para sus precios en la Bolsa de Chicago. En efecto, las posiciones julio y septiembre sumaron un 5,62 y un 5,70%, al pasar de 159,15 a 168,10 y de 162,39 a 171,65 dólares por tonelada. Así, el valor del cereal alcanzó el mejor nivel desde junio de 2016. El fundamento alcista continuó siendo el clima, que acentuó el atraso de las siembras, cuando la ventana ideal para implantar el grano grueso se cierra.
Al respecto, el martes el USDA relevó el avance de la siembra de maíz sobre el 58% del área prevista, respecto del 49% de la semana pasada; del 90% vigente un año atrás, y del 90% promedio de las últimas cuatro campañas. El dato oficial quedó por debajo del 63% previsto por mercado e, incluso, del rango posible, que fue del 59 al 68 por ciento. El organismo añadió que emergió el 32% de las plantas, contra el 19% de la semana pasada; el 69% de igual momento de 2018, y el 69% promedio. Los operadores esperan que el lunes próximo el USDA marque un progreso de la siembra sobre el 68% de la superficie prevista.
Como señalamos en el espacio de la soja, el viernes y hoy sábado las condiciones climáticas son más amigables con los farmers. También se prevé tiempo mayormente seco para el domingo. Esto podría favorecer el trabajo en aquellos campos que lograron desprenderse más rápidamente de los excesos.
Pero, dado que el atraso actual de la siembra de maíz resulta récord en la historia moderna del cereal estadounidense, todo lo que se diga o especule respecto del devenir de los cultivos entrará en el terreno de las probabilidades. Está claro que cuanto más tarde se siembre menor será el rinde y que cuanto más allá se corran los períodos que definirán el resultado de las plantas mayor será el riesgo de convivir con las temperaturas elevadas del verano del hemisferio Norte. Sin embargo, la atracción que ejercen los actuales precios del maíz podría hacer que muchos productores tomen el riesgo de apostar por un maíz muy tardío. En ese análisis también tienen en cuenta que parte de las pérdidas podrían ser compensadas por los pagos directos contemplados en el paquete de ayudas lanzado la semana anterior por la Casa Blanca para quienes padecen los efectos de los conflictos comerciales propiciados por el presidente de los Estados Unidos, Donad Trump.
En ese sentido, quizás cuando se anunció ese paquete de ayudas el mandatario estadounidense tuviera claro que a la guerra comercial con China, que puso a la soja en jaque, le sumaría una disputa con México, el principal comprador de maíz de los Estados Unidos. Ese nuevo conflicto se desató el jueves tras el cierre del mercado y provocó bajas superiores al 2% durante la rueda del viernes. En concreto, Trump anunció que desde el 10 del actual impondrá un arancel del 5% a todos los productos mexicanos que ingresen en los Estados Unidos. Pero agregó que esa tasa se irá incrementando hasta que el “problema” de la entrada de inmigrantes ilegales desde México se resuelva. Suena utópico creer que una cuestión de raíz humanitaria se corrija con un arancel. En su “hilo” de tuits, el mandatario incluyó entre los reclamos a su vecino país el tema drogas y un déficit comercial de “100.000 millones de dólares”. Esta disputa recién comienza, por lo que es muy pronto para aventurar consecuencias.
Como también lo comentamos en el caso de la soja, hoy el clima lo cubre todo. Los precios acumulan subas mayores al 20% en sólo tres semanas y pocos tienen interés por hurgar en el Lado B del mercado. A diferencia de la oleaginosa, el maíz ya está jugando el tiempo de descuento para sus siembras y no caben dudas que no logrará cumplirse con la meta fijada por el USDA, de 37,55 millones de hectáreas, por lo que sus posibilidades de mantener un nivel de precio elevado tienen más sustento real. A medida que pasan los días, las especulaciones de los operadores ubican el área que será cubierta más abajo, ahora entre los 35 y los 35,8 millones de hectáreas. El tiempo; los precios, y las múltiples opciones de subsidios con que cuentan los farmers tendrán la última palabra sobre qué área finalmente cubrirá el maíz. Cuando ese interrogante esté resuelto comenzará otra película.
Un dato que podría potenciar la alicaída industria del etanol estadounidense se difundió el viernes, dado que la Agencia de Protección Ambiental confirmó que el E15 (mezcla de gasolina y etanol) se podrá vender todo el año. Así se levantó una veda que regía desde 2011 para la comercialización de este “blend” durante el verano. La industria petrolera ya anunció que objetará la medida en la Justicia.
Positivo resultó el informe semanal sobre las exportaciones estadounidenses. En efecto, el viernes el USDA relevó ventas de maíz 2018/2019 por 906.800 toneladas, por encimade las 442.100 toneladas del reporte anterior y del rango previsto por el mercado, de 350.000 a 650.000 toneladas. Los negocios 2019/2020 sumaron 76.500 toneladas, por debajo de las 183.900 toneladas de la semana pasada y del rango calculado por los privados, de 100.000 a 200.000 toneladas.
TRIGO
El trigo argentino también completó una semana positiva. Las ofertas de los exportadores por el grano disponible crecieron de 190 a 200 dólares por tonelada para el Gran Rosario; de 195 a 205 dólares para Bahía Blanca, y de 180 a 185 dólares para Necochea.
Para el viernes el FAS teórico del trigo fue calculado por Agroindustria en $ 8582, mientras que para el lunes fue fijado en 9016 pesos. El rango de ofertas de los molinos relevado a diario por la BCBA pasó 7900/9950 a 8350/10.100 pesos por tonelada, según calidad, procedencia y forma de pago. El valor FOB del trigo pan en los puertos argentinos para los embarques en junio creció de 223 a 240 dólares por tonelada.
La tónica alcista del trigo en los Estados Unidos mejoró la perspectiva para los precioslocales de la cosecha 2019/2020, que hasta pocos días atrás eran muy poco atractivos. En el balance semanal, las propuestas pasaron de 160 a 170 dólares para las entregas en noviembre/diciembre; de 163/165 a 170 dólares para enero; de 165/167 a 173 dólares para febrero, y de 168/170 a 175 dólares para marzo. Vale destacar que el miércoles los compradores llegaron a pagar hasta 180 dólares para las descargas entre noviembre y enero. En esa jornada se comercializaron cerca de 200.000 toneladas del cereal.
También cerró con saldo positivo el segmento comercial en el Matba, donde los ajustes de las posiciones julio y enero crecieron de 195 a 203 y de 167 a 178 dólares por tonelada.
En su informe sobre carga de buques programada, la BCR indicó que entre el 29 de mayo y el 28 de junio deben salir desde el Gran Rosario 87.500 toneladas de trigo; desde Bahía Blanca, 58.300 toneladas; desde Necochea, 65.264 toneladas, y desde otros puertos, 25.000 toneladas.
En cuanto a los cultivos, la BCBA relevó el jueves el avance de la siembra de trigo sobre el 7,7% de los 6,4 millones de hectáreas previstos. “La siembra alcanzó a cubrir más de 490.000 hectáreas. Tras una semana sin lluvias varios cuadros que se encontraban con problemas de piso han comenzado a recuperarse, dando paso a la entrada de las sembradoras. Los mayores progresos se dieron en el NOA, centro-norte de Córdoba y Santa Fe y en el Núcleo Norte. Mientras tanto, en el NEA la actividad continúa demorada por la imposibilidad de tránsito en lotes y caminos. Por su parte, se relevan las primeras pruebas de siembra en el resto de las zonas agrícolas, pero se espera que las labores se afiancen para la primera quincena de junio”.
El balance de la semana también fue positivo para los precios del trigo en los Estados Unidos. Las posiciones julio y septiembre en la Bolsa de Chicago sumaron un 2,76 y un 2,62%, al pasar de 179,86 a 184,82 y de 182,52 a 187,30 dólares por tonelada. En Kansas, los mismos contratos ganaron un 7,01 y un 6,95%, tras variar de 162,41 a 173,80 y de 166,54 a 178,12 dólares por tonelada. El nuevo movimiento alcista estuvo impulsado por las persistentes subas del maíz, pero también por el temor a que los excesos de humedad afecten la calidad del trigo de invierno. Sumó a la tónica positiva la especulaciónde los inversores con la falta de humedad en Rusia.
Respecto de los cultivos, el martes el USDA ponderó el 61% de los trigos de invierno en estado bueno/excelente, por debajo del 66% de semana pasada, pero lejos del 38% vigente un año atrás. El nuevo dato oficial quedó abajo del 65% previsto por el mercado, dentro de un rango posible que fue del 64 al 66%. Además, indicó que está espigado el 66% de los cultivos, contra el 54% de la semana anterior; el 71% vigente un año atrás, y el 76% promedio de las últimas cuatro campañas. En el caso puntual de Kansas, el 55% de los trigos presenta una condición buena/excelente, por debajo del 60% de la semana pasada, pero muy por encima del magro 17% de igual momento del año pasado.
En cuanto al trigo de primavera, el USDA relevó el avance de la siembra sobre el 84%del área prevista, frente al 70% de la semana pasada; al 89% vigente un año atrás, y al 91% promedio. El dato oficial quedó por encima del 83% previsto por los privados, que manejaron un rango del 80 al 88%. Añadió que emergió el 47% de las plantas, contra el 26% de la semana anterior; el 59% de 2018, y el 69% promedio.
Levemente positivo resultó el informe semanal sobre las exportaciones de los Estados Unidos. El viernes, el USDA relevó ventas 2018/2019 por 153.000 toneladas de trigo, por encima de las 48.400 toneladas del trabajo precedente y dentro del rango previsto por el mercado, de entre 50.000 y 250.000 toneladas. Los negocios 2019/2020 sumaron 411.800 toneladas, por encima de las 344.900 toneladas de la semana pasada y del rango calculado por los operadores, de entre 150.000 y 350.000 toneladas.
En cuanto a Rusia, si bien desde las últimas semanas de mayo se evidencia una incipiente falta de humedad, hasta el momento el estado de los cultivos es bueno en la mayoría de las áreas productoras del grano fino. Según un relevamiento de Refinitiv Agriculture luego de una recorrida por zonas productoras, en general se prevén rendimientos mayores a los de la campaña pasada que, además del aumento de la superficie, permitirán obtener una cosecha abundante. Los técnicos de la firma sostuvieron que comienzan a verse síntomas de estrés hídrico, pero que aún es prematuro evaluar eventuales pérdidas. Así, el clima, también en Rusia, y la infaltable especulación de los fondos de inversión en Chicago permite presagiar semanas volátiles para el trigo, que ingresa en el mes del inicio de la cosecha en el hemisferio Norte.
Fuente: Granar