Hablemos de ganadería, jornada para la integración de la cadena ganadera, se realizó en la ciudad de Villa Ángela, organizada por el Ministerio de Producción, Ministerio de Industria, Comercio y Servicios, Consejo Federal de Inversiones, colaboraron: el Nuevo Banco del Chaco y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria.
Con las palabras del presidente de la Sociedad Rural de Villa Ángela, Gustavo Porro; del presidente del Concejo del Municipio de Villa Ángela, Hugo Miguel Gaczek; de la directora del Centro Regional Chaco Formosa del INTA, Diana Piedra; del Ministro de la Producción, Marcelo Repetto; y finalmente del gobernador de la provincia, Domingo Peppo quedó inaugurada la primera Jornada para la Integración de la Cadena Ganadera “Hablemos de Ganadería”, realizada en las instalaciones de la Sociedad Rural de Villa Ángela el viernes 24 de agosto 2018.
Frente al auditorio lleno, con 300 asistentes, la Ing. Diana Piedra expresó para nosotros desde el INTA la ganadería es hoy el tema priorizado el tema nacional y a nivel regional como un desafío para los próximos años en términos de lo que debemos investigar y de lo que tenemos que transferir y comunicar (…) las 5 Experimentales de Chaco trabajan en ganadería: en manejo, sanidad, producción, alimentación. El desafío de despegar como sector ganadero.
El primer seminario fue sobre la situación actual del sector y tendencias del negocio ganadero, a cargo del Lic. Victor Tonelli, quien analizó los cambios estructurales del negocio de ganados y carnes, la situación de la oferta y demanda, del mercado interno como de la exportación, la posible evolución de los precios del ganado gordo y de la invernada. Finalmente, en cada caso planteó las oportunidades y amenazas que contribuyen a la toma de decisiones.
Le siguió el Ing. Fernando Canosa, con el seminario ganadería argentina: un gigante dormido. Durante el mismo expresó la evolución, los cambios territoriales y productivos en el sector, cuál es el potencial de la producción, la calidad, trazabilidad y genética y la oportunidad de la situación actual, compartió el avance institucional estratégico de la Mesa de Carnes.
Técnicos del INTA presentaron sus investigaciones a través de posters científicos y también disertaron en el seminario llamado: opciones para una cría eficiente. Ellos fueron: José Emilio Rosello Brajovich y María Victoria Rossner, del INTA Colonia Benitez y José Luciano Chiossone del INTA Sáenz Peña, respectivamente.
Comenzó el Ing. Agr. Rosello quien describió su trabajo intitulado recría eficiente de la vaquilla, este punto destacado como un aspecto fundamental de la cría, ya que logrando un entore a los dos años se incrementa un 25% el porcentaje de preñez de un rodeo y es mucho más sencillo disminuir un año la edad de entore que incrementar un 25% la preñez.
Etapas críticas de la recría para lograr un peso de entore adecuado:
El primer objetivo es lograr pesos mínimos de 320 kg por animal al momento de entore de la vaquilla. Para ello debemos considerar tres etapas críticas.
1. La selección, debe ser la cabeza de parición por dos motivos, el primero y más importante es que se logra pesos al momento del destete de este animal superiores al cuerpo y a la cola, lo que nos facilita mucho la recría posterior del mismo. Y, en segundo lugar, las hembras cabeza tienen la tendencia a comportarse como cabeza de parición ya siendo vientre adulto.
2. El primer invierno, se debe lograr durante esta etapa ganancias diarias de peso superiores a los 300 gr/an/día, condición fundamental para una correcta recría, ya que de esta etapa depende lograr el peso objetivo de entore del animal y el desarrollo adecuado para su primer servicio.
3. Segundo invierno, si logramos sortear las etapas anteriores con los detalles mencionados, el segundo invierno es una tarea más sencilla, sólo ajustar un mínimo de ganancia, por cualquier método conocido de suplementación, para lograr 320 kg de peso mínimo al momento del servicio.
¿Por qué la importancia del peso al momento de servicio?
Por tres factores:
El primero, los índices de preñez logrados en vaquillas de un peso mayor a 320 kg, son significativamente superiores a aquellas de menor peso o aquellas que vengan con pérdidas de peso durante su segundo invierno, la experiencia nos demuestra que logrando este objetivo la preñez a la iatf es superior al 55% en esta categoría.
El segundo lugar, esta hembra tiene probabilidades muy altas de preñarse en su segundo servicio con resultados muy satisfactorios, (65-75% de preñez en este momento, punto de relevancia ya que es una categoría critica en los rodeos de cría, la hembra de segundo servicio)
Por último, con respecto al comportamiento ya como vientre productivo, las preñeces posteriores, son muy superiores a aquellos rodeos de cría que no logran estos pesos de entore mencionados.
En conclusión, disminuir la edad de entore a dos años aumenta un 25% el porcentaje de preñez en un rodeo de cría, para ello es fundamental identificar las etapas críticas de la recría, cumplir con los objetivos pretendidos en estas etapas, para hacer más productivos los rodeos.
El Ing. Agr. José Chiossone presentó información sobre planificación forrajera y forrajes conservados en la actividad de cría. Uno de los desafíos es el ajuste de carga, acomodar el balance forrajero, eso lo hacemos o bajando la cantidad de animales o aumentando la producción de alimento, de forrajes, de pasturas, de pastizal natural, expresó. Enfatizó la importancia de incorporar pasturas, de integrarla con los pastizales naturales, hacer el manejo integral, sin detrimento de ninguna de las dos.
Respecto de la presupuestación forrajera, para atender a la variación dentro del año que sabemos que nuestras pasturas y pastizales esencialmente producen muchos forrajes en verano, tenemos que alimentar al rodeo todo el ciclo entonces siempre se nos produce un bache invernal. Para cubrir eso es que utilizamos los forrajes conservados, básicamente los dos que utilizamos en gran volumen en la zona y que están disponibles para el productor son silaje y heno, rollos principalmente, en la actividad de cría.
Finalizó con la idea de repasar los puntos críticos para lograr calidad en el forraje conservado, buenos costos, que es muy importante y también lograr un buen resultado en la utilización en buena performance animal.
La Med. Vet. Rossner trató el tema de tristeza bovina (babesiosis y anaplasmosis), donde abordó la importancia de la enfermedad en el NEA y para la producción ganadera, considerando conceptos sobre los agentes que la causan, proporción de establecimientos afectados, pérdidas económicas atribuidas a estas patologías.
La garrapata común del bovino (Boophilus microplus) transmite dos de los parásitos de tristeza: Babesia bigemina y Babesia bovis, mientras que el Anaplasma también es trasmitido por esta especie de garrapata y mosquitos, tábanos y moscas bravas, así como los implementos utilizados para ciertas prácticas de campo como castración, descorne o vacunaciones.
Los brotes son evitables con herramientas disponibles: el tratamiento con medicamentos específicos, el uso de vacunas y el control de sus vectores como la garrapata común del bovino.
En cuanto al diagnóstico se planteó cómo identificar la enfermedad y qué hacer luego. Para el tratamiento es de importancia determinar el agente causal para un correcto tratamiento y también el uso de herramientas tecnológicas desarrolladas por INTA para su prevención, como lo son las hemovacunas. Se presentaron algunos trabajos con resultados en terneros de la zona, así como también en qué animales se recomienda la vacuna y los cuidados a tener en cuenta.
Por último, las consideraciones finales hablan de los cambios en los sistemas ganaderos actuales y cómo la prevención de éstas y otras enfermedades deben pensarse entre profesionales y productores como una inversión en la salud del rodeo y no como un gasto.
Fuente: INTA por Marina Buschiazo