Las exportaciones regionales de manzanas con destino al mercado brasileño totalizaron, en estos dos primeros meses del año, algo más de 1.730 toneladas. La cifra representa un salto cercano al 230% respecto de los embarques consolidados para este mismo período del año anterior.
Distintas fuentes del sector privado atribuyen este importante incremento en las ventas durante la primera parte del 2018 a los elevados stocks que viene arrastrando la manzana desde octubre pasado. “La mayor parte de estas colocaciones es fruta del año anterior. A partir del tercer trimestre de 2017 la salida de manzana de las cámaras frigoríficas se ralentizó y esto presionó sobre los números de este año”, confió un importante exportador regional.
Por otra parte, no hay que dejar de mencionar que los números de exportaciones del año pasado han sido bajos. Según datos suministrados por el Senasa durante todo el 2017 las exportaciones de manzanas a Brasil alcanzaron las 11.874 toneladas, reflejando un desplome del 45% respecto de 2016. El vecino país concentró el año pasado el 17% del total de las ventas externas de manzanas del valle. “La menor demanda del mercado interno determinó que mucha de la manzana que estaba disponible para ese destino se tuvo que reorientar hacia Brasil buscando así un mejor retorno de la fruta”, agregó la fuente consultada.
Desde la demanda también se observaron cambios. Según la estadística suministrada por la Asociación Mundial de la Manzana y la Pera (WAPA, por sus siglas en inglés) la producción de manzanas en Brasil se estima para el 2018 en torno a los 1,18 millones de toneladas, volumen 11% inferior al de 2017. La menor oferta en destino sumado a un tibio crecimiento en su economía proyecta valores positivos sobre los precios finales del producto. Pese a ello, a los empresarios regionales se los nota cautos a la hora de evaluar expectativas en este mercado. “Los costos siguen siendo altos y contra eso no hay forma de competir con Chile y otros países que colocan su oferta en este mercado”, manifiestan.
En relación a las peras, informes señalan que, en estos dos primeros meses del año, se llevan exportados a Brasil algo más de 14.000 toneladas, un volumen que refleja una caída del orden del 11% respecto del mismo período del año anterior.
Las colocaciones de peras en el vecino país alcanzaron durante 2017 algo más de 88.100 toneladas mostrando una caída interanual del 8%. Por otra parte este destino concentró el 35% del total de las exportaciones argentinas de peras.
Para la presente temporada las expectativas de venta de la especie en Brasil son positivas, teniendo en cuenta que el Valle prevé exportar más pera hacia ultramar por la demanda existente en el Viejo Continente y la buena calidad lograda en origen.