Los productores de frutas del Alto Valle de Río Negro pedirán al Gobierno nacional una asistencia financiera por unos $ 600 millones para encarar la cosecha de 2018.
Según anticiparon, las proyecciones económicas del sector siguen complicadas dado que se volverá a registrar una brecha entre las liquidaciones esperadas y el costo de producción, previsto en 34 centavos de dólar. Frente a este escenario, intentan que Nación afronte el costo de la recolección de peras y manzanas, aportando una compensación de $ 1,50 por kilo de fruta, publicó este martes el Diario de Río Negro.
La Mesa de Contractualización fijó el costo de producción en 34 centavos de dólar por kilo para peras y manzanas producida en la chacra, basándose en un estudio realizado por los técnicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Sebastián Hernández, presidente de la Cámara de Productores de Allen, dijo que la diferencia entre el precio previsto de venta y los costos de producción estará en unos 20 centavos de dólar por kilo, un nivel similar al de la temporada pasada.
El dilema a resolver es de dónde saldrá el dinero que faltará en la actividad primaria para que las pérdidas no sigan endeudando la economía de los productores, teniendo en cuenta que perderán, siempre de acuerdo al costo de producción, 14 centavos de dólar por kilo de fruta que van a vender. En el número global, la cifra del quebranto alcanzaría los 60 millones de dólares.
Hernández, integrante de la Federación de Productores, reconoció que el Gobierno de Mauricio Macri borró los subsidios para la actividad frutícola y será difícil ahora que acepte colaborar con el sector. Fuente: Ambito Financiero