En esta publicación se proponen indicadores para medir la sustentabilidad de los sistemas ganaderos en los malezales de la provincia de Corrientes.
Evaluar los sistemas de producción desde el punto de vista productivo y económico es una tarea relativamente frecuente. Es conocido el riesgo asumido por la actividad agropecuaria frente a las condiciones de mercado y climáticas que afectan directamente a los precios y rendimientos. Los establecimientos agropecuarios dedicados a la ganadería y ubicados en campos bajos de la provincia de Corrientes, tienen como limitante adicional el ambiente hostil que los hace aún más vulnerables. De aquí el interés por evaluar de manera más completa los sistemas de producción, intentando conocer no sólo el desempeño sino también la sustentabilidad de los mismos. El objetivo de este trabajo fue seleccionar indicadores que permitan medir las dimensiones económica, ambiental y social para evaluar la sustentabilidad de estos sistemas. Para operativizar el concepto de sustentabilidad se utilizó el método MESMIS, en base a un modelo ganadero representativo de los campos bajos de Corrientes. En primer lugar, se identificaron los puntos críticos del modelo y en relación a los mismos se definieron indicadores en talleres con referentes de cada dimensión, ajustándose a la disponibilidad de información a nivel productor. Se trabajó en gabinete con profesionales de INTA para establecer los cortes por indicador en la escala de menor a mayor sustentabilidad de 1 a 3. Por último, se midió cada uno de esos indicadores sobre el modelo y se calculó el índice de sustentabilidad global (ISG) como promedio del promedio de cada dimensión, definiendo las categorías de sustentabilidad crítica = 1, aceptable de >1 a 2 y óptima de >2 a 3. Los indicadores seleccionados fueron en la dimensión económica: Margen Bruto total, excedente del Ingreso al Capital, rentabilidad, dotación de personal para bovinos, manejo del excedente de agua, seguridad en la disponibilidad de agua, nivel de adopción tecnológica en bovinos, carga animal, producción de terneros, producción de carne total, eficiencia de stock en bovinos, participación de vaca gorda en ventas y relación costo / ingreso, en la dimensión ambiental: balance de P, balance de N, índice de heterogeneidad del paisaje y descanso del pastizal y en la dimensión social: interacción humano – animal, condiciones laborales de formalidad, condiciones laborales de seguridad, actualización del productor, formación del personal, asesoramiento técnico, diversificación de actividades, integración social y acceso al crédito bancario. Los resultados por dimensión fueron 1,54 en económica, 2,25 en ambiental y 1,44 en social, el ISG del modelo resultó 1,74 calificándose como de sustentabilidad aceptable. Tanto el método como estos indicadores, si bien son mejorables, se proponen para medir la sustentabilidad de sistemas de producción representados por el presente modelo. La consideración de la sustentabilidad en todas sus dimensiones mejora la toma de decisiones.
Fuente: INTA por Mariana Calvi, Liliana Laura Pellerano, María Daniela Chavez Clemente
