Soja: el clima seco y las altas temperaturas durante el mes de febrero reducen la proyección de producción

Luego de una nueva semana sin lluvias se agrava la condición del cultivo. El saldo negativo de las precipitaciones durante el mes de febrero, junto a las elevadas temperaturas durante pleno llenado de granos (R5/R6) en cuadros de primera, causaron pérdidas irreversibles sobre los rindes esperados en las principales zonas productivas. De forma similar, la soja de segunda, actualmente transitando estadios críticos, no solo prevé rindes por debajo a los promedios históricos, sino también pérdidas de superficie por encima de la media, siendo el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, el Centro-Este de Entre Ríos y el Núcleo Sur las zonas más comprometidas. Sin pronósticos alentadores en el corto plazo, la proyección de producción se reduce a 44.000.000 Tn, una caída de 2MTn con respecto a nuestro informe previo. Dicha estimación se encuentra sujeta a la evolución de los rindes una vez iniciada la recolección del cultivo.

 

MÁS INFORMACIÓN AGROPECUARIA CLIQUEÁ AQUí

 

Febrero, un mes crítico para la producción de soja sobre el centro y sur del área agrícola, culminó con un balance hídrico negativo. Importantes sectores del Núcleo Norte y Sur y el Centro-Norte de Santa Fe, informan que la escasa humedad, junto a las altas temperaturas, limitaron el crecimiento de cuadros de primera durante el llenado de grano. En los cuadros de segunda, actualmente en plena formación de vainas (R4), adicionalmente a las pérdidas en los rendimientos esperados, se reportan aborto de vainas, mermas en el stand de plantas e inclusive pérdidas en la superficie cosechable, siendo el CentroEste de Entre Ríos y el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires las regiones más afectadas. A la limitada humedad se le suman daños por trips, arañuelas y chinches, característicos de ambientes secos, y escapes de malezas resistentes como yuyo colorado y rama negra.

Paralelamente, sobre el norte del país, la falta de precipitaciones sobre el NEA comienza a encender las primeras alarmas, especialmente sobre la región sudoeste del Chaco. A la fecha, los cuadros más adelantados inician su llenado de granos (R5), mientras aguardan por lluvias que frenen el deterioro.

Con perfiles agotados y sin perspectivas de mejoras en el corto plazo, la estimación de producción se reduce a 44 MTn, una caída de 2 MTn con respecto a nuestra anterior proyección

 

Fuente: Bolsa Cereales de Buenos Aires

 

MÁS INFORMACIÓN AGROPECUARIA CLIQUEÁ AQUí