Santa Fe: lluvias y menores registros térmicos y cultivares con diferentes realidades
El informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe correspondiente a la semana comprendida entre el 15 y 21 de enero de 2025, que difunde la Bolsa de Comercio informe, en primer lugar, de lluvias acaecida en todos los departamentos de la región que fueron muy dispares.
En el cuadro que a continuación se publica, se informa de los montos de agua caída durante el período, con promedios mínimos y máximos y que fueron los siguientes:
Las cuestiones ambientales regularon y condicionaron las actividades agrícolas:
-La implantación de soja tardía, después de las precipitaciones, la disponibilidad de agua útil en la cama de siembra y a medida que las condiciones de piso lo permitieron, se retomó el proceso de siembra, particularmente en las distintas áreas que se habían planificado, lo que llevó al logro del avance intersemanal de solo 3 puntos, por lo que hasta la fecha se alcanzó el 96 % del total previsto, en la intención de siembra para la campaña 2024 – 2025, que se estimó en unas 600.000 ha.
-También la implantación de sorgo y la de maíz tardío, se vieron favorecidas por las condiciones climáticas que reinaron, ya que se revirtió la falta de humedad y la condición ambiental seca de los últimos 18 a 20 días, siempre según cada sector agrícola.
Se prevén a partir del viernes 24, altas probabilidades de precipitaciones de irregular distribución geográfica y montos pluviométricos.
A buen ritmo continuó el proceso de cosecha del girasol, solo se interrumpió durante un par de días, según zonas, por la inestabilidad y las precipitaciones ocurridas. En el norte del SEA, casi la totalidad de los cultivares alcanzaron la etapa de madurez fisiológica, momento ideal para la recolección.
Los rendimientos se consolidaron, con promedios mínimos que oscilaron desde 12 a 14 qq/ha, medios de 24 a 26 qq/ha y máximos de 31 a 32 qq/ha, con lotes puntuales que llegaron a 40 qq/ha, considerados como muy buenos, mejores de lo esperado, por el sector productivo.
En el resto, el estado de la oleaginosa fue desde bueno a muy bueno y excelente. No se detectaron enfermedades.
Los maizales, en plena etapa de alta demanda de agua de las reservas de los perfiles de los suelos al límite que. sumadas a las elevadas temperaturas diarias, provocaron en algunos cultivares, de acuerdo a la fecha de siembra, síntomas de déficit hídrico y en otros, la muerte de las hojas basales. Así como también la irregular formación de las mazorcas y llenado de grano.
En el área de estudio se observaron dos realidades distintas, bien diferenciadas, cuando:
a) las implantaciones se realizaron en la ventana óptima de siembra y fueron beneficiadas por las lluvias puntuales, al cereal se lo encontró en fases de fin de ciclo, R4 (grano pastoso), R5 (grano dentado) y en comienzo R6 (madurez fisiológica);
b) los lotes fueron sembrados durante las últimas jornadas, con un corrimiento o desfasaje de 20 a 25 días de la fecha ideal y como consecuencia de la escasa a nula disponibilidad de agua útil en la cama de siembra de los suelos, a los maizales se los visualizó en etapas de desarrollo, floración y comienzo de formación de grano, en los cuales se observó acartuchamiento de hoja, síntomas de déficit hídrico, antes de las lluvias registradas en la semana.
Principalmente, en el área de influencia de las cuencas lecheras, en los departamentos del centro del SEA, continuó el picado/embolsado de maizales. Los rendimientos promedios obtenidos variaron entre 14 y 16 m/bolsa/ha, evaluados como buenos a muy buenos, para la presente campaña.
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Los cultivares de soja temprana (de primera), en un importante porcentaje, nuevamente avanzaron en sus estados reproductivos, con una buena estructura de las plantas, altura, volumen de la masa foliar, uniformidad y con entre surcos cerrados.
En aquellos lotes que no lograron las características enunciadas, ya sea por aptitud de los suelos o condiciones hídricas, fueron los que expresaron síntomas de estrés hídrico, por ausencia de lluvias y estrés térmico por las elevadas temperaturas que se produjeron.
Hasta la fecha, el aspecto sanitario de los sojales no presentó inconvenientes, pero continuaron los monitoreos y chequeos a campo.
En la superficie total del área de estudio, centro norte santafesino, constituida por los departamentos Nueve de Julio, Vera, General Obligado, San Cristóbal, San Justo, San Javier, Garay, Castellanos, Las Colonias, La Capital, San Martín y San Jerónimo, como consecuencia de las precipitaciones ocurridas, se constató una reposición de la disponibilidad de agua útil en los perfiles de los suelos, situación muy irregular en su distribución geográfica.
La dinámica de los escenarios ambientales, las particularidades zonales, más los múltiples factores actuantes, condicionaron o regularon la toma de decisiones del ciclo de la cosecha gruesa 2024 – 2025
