Como consecuencia de una mayor oferta de ganado, consumo interno deprimido y valores de exportación en baja, el novillo perdió el 32% frente a la inflación. Para la actividad, respecto de la exportación, también se produjo, en los últimos meses, una caída de las cotizaciones internacionales.
Diego Ponti, analista de mercados ganaderos de la consultora AZ-Group, en declaraciones al diario La Nación, explicó: “Ahora tenés más oferta de carne; a eso se sumó la sequía y se aceleraron los procesos de engorde. El consumo interno está complicado, pero hay otros productos de consumo dentro de la canasta (básica alimentaria) que están complicados también”.
Ponti explicó que hay 3 factores principales que influyen e impiden el aumento del precio de la hacienda. En primer lugar, la menor demanda del consumo interno. “La gente no convalida compras. Es decir, ahí no ves la posibilidad de trasladar los precios a los consumidores. Está debilitado el consumo, cada vez hay más inflación, y no te convalidan la suba”, explicó.
Derrumbe. Además, otro factor dificulta el aumento del precio de la hacienda: “Tenías otra vía que es la exportación. El mercado internacional, que normalmente luce como una panacea, se derrumbó. China está un 35% abajo (en los precios). Normalmente, compra un 75% o 80% de las exportaciones argentinas. La Cuota Hilton pasó de los US$17.000 la tonelada a valer US$9.000, en octubre. El mercado interno no tiene poder de compra y el mercado internacional tampoco está en un fuerte en este momento”, precisó.
Ponti explicó que la carne no sube en la góndola para el consumidor porque “es un mercado de competencia perfecta”. Esto, además, tiene la particularidad que, para la producción animal, los productores deben tomar decisiones que repercuten a 2 o más años de plazo.
“Al comparar octubre (de 2022) contra octubre (de 2021) hubo un 54% (de incremento de precio) en el novillo, de hacienda pesada”, indicó. Según destacó el analista, para un novillito que va al mercado interno, su valor cayó 3% respecto de abril último, cuando registró la última suba. En tanto, en la comparación interanual, también en octubre, el novillito registró un incremento del 56% respecto de una inflación mayor al 80%, en igual lapso. Para Ponti, hacia fin de año puede haber una corrección de precios, debido a una posible merma en la oferta, que podría impactar en el consumidor.
Promedio. Según los datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), en septiembre pasado, el valor promedio de los distintos cortes vacunos fue de $1.178,46 el kilo, con una variación respecto de agosto de 1,8%. Ese monto, si se lo compara con septiembre de 2021, representó una suba del 67,2%, por debajo del 83% de la inflación interanual.
Por su parte, Miguel Schiariti, presidente de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra), sostuvo, en declaraciones al mismo medio que “la falta del poder adquisitivo del mercado interno y el exceso de oferta producto de la sequía” hizo que los precios de los cortes vacunos se mantuvieran entre junio, julio y agosto. Y agregó que, en septiembre, hubo un aumento de un 3,2%, pero no a raíz de una suba en el ganado, sino que se debió a un incremento lógico del traslado de la inflación de los costos de alquileres y transportes, entre otros rubros que participan de la cadena cárnica vacuna.
Fin de año. Por otra parte, en un informe del Rosgan, mercado ganadero que opera en el ámbito de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), destacó que el precio de la carne enfrenta un fin de año con “correcciones difíciles de plasmar”.
El trabajo señala que “una combinación de demanda interna agotada y un elevado nivel de oferta, mantiene prácticamente planchados los precios de la carne vacuna, en un contexto de creciente aceleración inflacionaria. En los últimos cuatro meses, el precio de la carne vacuna viene registrando ajustes de precios que no logran cubrir el aumento inflacionario, acumulando caídas de más del 18% en términos reales. El consumo se muestra cada vez más elástico a la suba de precios y dispuesto a reemplazar el producto por alternativas más económicas”.