Nuevas variedades forrajeras del INTA para enfrentar sequías y anegamientos en el NEA
El INTA Corrientes desarrolló dos nuevas líneas clonales de pasto Nilo —Porãve INTA y Tuguy Hovy INTA— con alto potencial productivo, adaptadas a las condiciones extremas del noreste argentino. Estas variedades forrajeras representan una opción estratégica para mejorar la ganadería en suelos húmedos y con baja capacidad de drenaje, frecuentes en el NEA, así como en períodos prolongados de sequía.
Ambas líneas surgen de un programa de mejoramiento iniciado en 2011 por el equipo de investigación liderado por Silvana Consuelo Ferrari Usandizaga, con el objetivo de superar la falta de semilla comercial y potenciar las cualidades del pasto Nilo (Acroceras macrum), una gramínea africana introducida en Argentina en los años 80.
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Porãve INTA (que significa “el mejor” en guaraní) posee porte rastrero, cubre bien el suelo, conserva la humedad y muestra una notable producción de biomasa, incluso en suelos con salinidad moderada. Por su parte, Tuguy Hovy INTA (“sangre azul”) se caracteriza por su porte erecto, hojas resistentes al pisoteo y tolerancia a sequías de más de tres meses, lo que la convierte en una excelente opción para forraje diferido o invierno.
“Buscamos desarrollar cultivares que respondan a las condiciones reales del territorio y amplíen el abanico de opciones forrajeras para los productores”, explicó Ferrari Usandizaga. Y destacó que estas líneas permiten sostener la productividad ganadera en ambientes marginales y con alta variabilidad climática.
El trabajo del INTA también incluye estudios moleculares y cruzamientos con materiales sudafricanos, a partir de los cuales se generaron más de 500 líneas experimentales. Porãve y Tuguy Hovy fueron inscriptas oficialmente en el INASE y hoy son parte de una estrategia de largo plazo para diversificar y mejorar la oferta de pasturas en la región.
Aunque aún queda pendiente avanzar en la producción de semillas viables, estos desarrollos marcan un paso clave para adaptar la ganadería del NEA a los desafíos ambientales del presente y del futuro.
Fuente: INTA Informa