En un suceso lamentable que ha sacudido a la comunidad de Mar del Plata, Juan Abel Sequeira, un trabajador rural de 67 años, perdió la vida tras resbalar y caer desde un molino. El incidente ocurrió en la estancia ‘Laguna Ponce’, ubicada detrás del cementerio parque, cuando Sequeira realizaba tareas de mantenimiento en las alturas.
Sequeira, mientras subía al molino con la intención de repararlo, sufrió un resbalón y cayó desde una altura de ocho metros. A pesar de que fue trasladado de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos, las graves heridas que sufrió en la caída resultaron ser fatales.
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La fiscalía, bajo la supervisión de Pablo Cistoldi de la UFI n.º 11, ha iniciado una investigación etiquetada como ‘averiguación de causales de muerte’. El objetivo es determinar si las condiciones de trabajo eran seguras y si se contaba con las medidas de protección necesarias. La tragedia ha puesto en el centro del debate las condiciones de seguridad en el trabajo rural, particularmente en tareas que implican alturas considerables o la manipulación de maquinaria pesada.
El caso de Juan Abel Sequeira ha llevado a cuestionamientos sobre las normas de seguridad en el entorno rural. Mientras la investigación procede, la comunidad de Mar del Plata llora por un hombre que dedicó su vida al trabajo en el campo, y pide mayores medidas de prevención para evitar tragedias similares en el futuro.
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