UPL Corp Argentina reunió a su cadena de distribuidores en el sur de la provincia de Buenos Aires. ¿Cómo ven el manejo de malezas y el uso de las biosoluciones en la región? La opinión desde el lote.
Fabricio Salvetti Mock es responsable de insumos de AgroAlarcia, un distribuidor con sede en Coronel Suárez que asistió al último meeting point organizado por UPL Corp Argentina en Sierra de la Ventana, al sur de la provincia de Buenos Aires. “Hoy los cultivos están muy retrasados, por el frío y la falta de lluvias. Tenemos que fertilizar los trigos con nitrógeno y no estamos pudiendo hacerlo por la falta de precipitaciones”, se lamentó y recordó que en esta zona el partido lo definen los cultivos de fina. En segundo lugar el girasol. En tanto que el maíz y la soja dependen de las condiciones climáticas del año.
Cuando vuelvan las precipitaciones y las temperaturas, las malezas serán el gran dolor de cabeza del trigo y la cebada. “Tenemos problemas de raigrás resistente a glifosato, avena negra o avena fatua y crucíferas”, aclaró Salvetti Mock.
“Por un tema de calidad de semillas, este año fue clave el uso de terápicos como RANCONA TRIO® en trigo, porque necesitamos que esa semilla nazca y esté protegida”, destacó el técnico. Y para el manejo de malezas, marcó la importancia del uso de graminicidas postemergentes acompañados de antiestresantes: “cuando no tenés precipitaciones, a la planta le cuesta más recuperarse, de ahí la necesidad de usar productos como BIOZYME TF® u OPTIMAT®”.
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“Hacia el futuro esperamos que lleguen las precipitaciones para que se den las condiciones para aplicar fungicidas. No debemos olvidar que a los patógenos les pasa igual que a los cultivos, se desarrollan en un ambiente bueno de precipitaciones y temperatura. Si es bueno para el patógeno, también es bueno para el cultivo. Por eso, llegar a la instancia de uso de fungicidas es auspicioso”, reflexionó el representante de AgroAlarcia .
Con respecto a la campaña gruesa, “venimos viendo que la pre campaña de girasol se desarrolla con normalidad, también la de maíz -aunque algunos se están volcando a sorgo por el problema con chicharrita- y en soja nos sorprendió un poco que ya hay muchos productores preguntando por semillas. Hoy los productores van comprando lote a lote. Esta campaña es rara”, argumentó el hombre de Coronel Suárez.
Guillermo Arro es asesor técnico y responsable de producción de la firma Raúl H. Pérez SA, una agronomía de Coronel Dorrego con accionar en el sudeste de la provincia de Buenos Aires, que también participó del meeting point. “Por la falta de lluvia y las bajas temperaturas, los cultivos están sufriendo”, dijo y aclaró que hace tres o cuatro años comenzaron a incorporar productos biológicos.
“Hemos utilizado pseudomonas para tratar de evitar el uso de terápicos químicos, con muy buenos resultados. Sembramos cebada sobre cebada y eso contribuye a la aparición de algunas enfermedades. También, gradualmente, comenzamos a utilizar bioestimulantes para evitar la fitotoxicidad que generan los herbicidas”, detalló Arro.
El raigrás también fue la maleza mencionada por el técnico de Coronel Dorrego. “La manejamos básicamente con piroxasulfone. Siempre tratamos de lograr barbechos limpios porque una vez que nació se hace muy complejo controlarlo”, analizó.
Desde Bahía Blanca, Juan Martín Urra, gerente comercial de Terramar JV, también participó del encuentro organizado por UPL y se refirió a la falta de humedad. El técnico comentó que en la zona se hacen barbechos largos y después se suelen usar residuales. “Cuesta un poco salir del residual básico, de una atrazina y s-metolacloro. Pero sí estamos viendo que se están usando mucho más residuales, tanto en la siembra de gruesa como de fina. En lo que hace al uso de biológicos, los estamos recomendando mucho con el uso de graminicidas, ya que el momento de aplicación es en época de frío. Observamos alta fitotoxicidad y hay soluciones biológicas que lo recuperan de ese estrés”, dijo y aclaró: “Yo creía que era algo que se iba a implementar dentro de muchos años. Pero se adelantó. El productor está demandando biológicos, tanto para curasemillas como durante el cultivo”.
Martín Principiano es responsable técnico de Lares SRL y fue uno de los oradores del encuentro. El especialista destacó que en materia de malezas las principales problemáticas que tiene la región son el raigrás y la resistencia a los principales herbicidas como glifosato, ALS y graminicidas, y las crucíferas, donde también hay resistencia a glifosato, hormonales y ALS.
En lo que hace a raigrás, Principiano hizo mucho hincapié en el control de presiembra y en el uso de herbicidas de post emergencia para el reseteo del lote con productos como graminicidas y glufosinato de amonio. “En trigo y cebada, para el control de raigrás es muy importante el uso de soluciones preemergentes. Además, para el control de crucíferas estamos viendo que se empiezan a incorporar otros herbicidas como amicarbazone – DINAMIC®-, o la mezcla con piroxasulfone, pensando en cultivos como maíz”, puntualizó.
UPL lanzó este año WINGER®, que es piroxasulfone al 85% WDG, una herramienta fundamental para la problemática de malezas, principalmente para Amaranthus y gramíneas. Tiene registro en trigo, cebada, soja y maíz.
Fuente: UPL