Entomólogos de 21 unidades del INTA están llevando a cabo un extenso monitoreo de la plaga Dalbulus maidis, conocida como chicharrita del maíz. Este esfuerzo busca estudiar la evolución poblacional de esta plaga y, en el futuro, estimar el riesgo epidemiológico asociado. A través de un seguimiento georreferenciado, se actualizará quincenalmente el número de individuos registrados en cada sitio de monitoreo.
El área de estudio abarca aproximadamente 1.600 kilómetros de norte a sur y 750 kilómetros de oeste a este. Este equipo de entomólogos del INTA está evaluando los cambios en la densidad relativa de Dalbulus maidis. Han conformado el primer “mapa nacional de monitoreo de chicharrita del maíz”, un repositorio que proporcionará información detallada sobre el número de individuos en cada sitio georreferenciado.
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El seguimiento pormenorizado de esta plaga tiene como objetivo acumular datos e información que permitan, en un futuro, estimar el riesgo epidemiológico del insecto vector del achaparramiento del maíz. Este análisis detallado se realizará tanto en tiempo como en espacio, permitiendo describir cómo cambia la densidad de chicharritas en el tiempo en cada ubicación geográfica. La información obtenida será de gran utilidad para los productores, proporcionando una referencia valiosa para tomar decisiones informadas sobre el monitoreo de esta plaga.
La creación de este primer mapa nacional es un hito importante que disminuirá la incertidumbre en cuanto al riesgo de esta plaga, especialmente en zonas donde los muestreos constantes muestran ausencia de chicharritas. Los productores cercanos a los puntos del mapa tendrán una base sólida para tomar decisiones de monitoreo con el asesoramiento profesional correspondiente. Esta iniciativa, que involucra a 21 unidades del INTA en 11 provincias, representa un avance significativo en la protección vegetal y el manejo eficaz de plagas agrícolas.
