1. Buenas perspectivas a nivel local e internacional presionan las cotizaciones de los granos gruesos.
Luego de tres años consecutivos de lluvias por debajo de la media, los efectos de un año Niño se están haciendo sentir sobre la producción agraria argentina. Las lluvias recurrentes desde comienzos de noviembre, así como las temperaturas moderadas, vienen acompañando a los cultivos y generan buenas perspectivas para la cosecha de granos gruesos, que se encuentra pronta a comenzar en nuestro país.
En este sentido, el último informe de estimación mensual nacional de GEA-BCR proyectó una producción de soja de 52,0 Mt para la campaña que comenzará en abril, con un crecimiento interanual del 160%, luego de haber alcanzado en 2022/23 el menor volumen cosechado del siglo. Así, el peso de una mayor producción impacta sobre el mercado a término, considerando que el futuro de soja mayo cotizó este jueves a U$S 284,0/t en Matba Rofex, 5% por debajo respecto del jueves de la semana previa, y 12% por detrás de lo que cotizaba a principios de diciembre.
Por su parte, el contexto internacional también presiona las cotizaciones de la oleaginosa. Las nuevas estimaciones del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) dan cuenta de mejores rendimientos de la cosecha de soja estadounidense recién recolectada, ajustando la producción al alza hasta 113,4 Mt, por encima de lo esperado por el mercado. Asimismo, la cosecha en Brasil, que sufrió un recorte respecto de las estimaciones previas, se ubicó por encima de lo que esperaban los analistas, y sería totalmente compensada por la mayor producción de otros países, entre ellos Estados Unidos y Argentina.
De igual manera, la demanda de soja proveniente de China, principal importador mundial de la oleaginosa, mostró una ralentización en el último mes, reflejando el debilitamiento de la demanda interna como forraje para la industria ganadera. Consecuentemente, las exportaciones estadounidenses se han debilitado y la cuota de mercado del país norteamericano en las exportaciones mundiales de soja siguió disminuyendo frente a la competitividad de los suministros brasileños. Así, de acuerdo con datos de la revista Oil World, los embarques estimados de soja estadounidense totalizaron apenas 24,3 Mt entre septiembre y diciembre, el nivel más bajo de los últimos cuatro años, contribuyendo a la caída en los precios.
En el caso del maíz sucede una dinámica similar. A nivel local, la persistencia de las lluvias ha ayudado a mejorar los rindes, de manera que las proyecciones actuales se ubican por encima de las primeras estimaciones e indican que Argentina alcanzaría una producción de maíz de 59,0 Mt en el ciclo 2023/24, la más alta de su historia, mientras no se descarta que existan mejoras. Consecuentemente, los precios del futuro de maíz abril han mostrado una dinámica bajista, y cotizaron este jueves a U$S 169,8/t en el mercado a término local, mostrando una caída del 5% entre semanas y del 10% respecto a principios de diciembre.
A nivel internacional, se advierte que Argentina no sería el único país en alcanzar una producción récord del cereal. Las últimas estimaciones del USDA exhibieron rindes históricos para la cosecha de maíz estadounidense 2023/24, e indicaron que el país norteamericano lograría una producción récord de 389,7 Mt.
Por último, cabe mencionar que incluso la cotización en pesos de ambos granos gruesos en el mercado físico de granos local mostró una baja durante la última semana. Por un lado, la soja finalizó este jueves con un precio de referencia de $ 275.000/t, $ 500 por debajo respecto del jueves de la semana previa, en tanto el maíz registró un precio de $ 155.000/t este jueves, por debajo de los $ 160.000/t que anotó una semana atrás.
2. Disminuyen las estimaciones de producción de soja de Brasil.
Desde hace ya varios años, Brasil se erige como el principal productor de soja a nivel mundial, desplazando a Estados Unidos, y ocupando asimismo el primer puesto en el ranking global de exportadores de la oleaginosa. Tomando como referencia los datos del USDA, nuestro país vecino habría alcanzado en 2022/23 una producción récord de 160,0 Mt de soja, 20,5 Mt por encima de la mayor producción de su historia hasta entonces. No conforme con ello, las primeras estimaciones de producción 2023/24 indicaban que Brasil superaría sus propias marcas y alcanzaría una nueva producción histórica durante la campaña entrante.
Pero la llegada de un año Niño, que tanto ha beneficiado la producción argentina, impactó de manera adversa sobre la cosecha brasileña. El clima seco y extremadamente caluroso en el centro y norte del país, junto con un exceso de lluvias en el sur, han afectado notoriamente la producción de granos, llevando a un recorte en las estimaciones de producción de la campaña entrante.
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Por una parte, en el último informe mensual del USDA, el recorte en la producción de soja de Brasil 2023/24 fue de 4,0 Mt, llevándola a 157,0 Mt, por debajo de la cosecha récord de la campaña previa. Sin embargo, la estimación resulta optimista y se mantiene como una de las más altas. Mientras tanto, el Consejo Internacional de Granos (IGC) rebajó su estimación productiva en 6,5 Mt, de manera que la cosecha brasileña de soja se ubicaría en 153,5 Mt. Asimismo, la revista especializada Oil World, que ya partía de estimaciones anteriores más bajas, redujo su proyección en 1,0 Mt, para ubicarla en 151,0 Mt.
Por otra parte, la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab) de Brasil realizó asimismo una fuerte corrección en sus estimaciones, que ubicaría a la producción de soja de nuestro país vecino en 155,3 Mt para el ciclo 2023/24, cuando la estimación previa indicaba una cosecha de 160,2 Mt. Adicionalmente, la consultora brasileña AgRural dio a conocer esta semana una estimación de producción de soja de 150,1 Mt, 9,0 Mt por debajo de la estimación previa.
No obstante, a pesar de los recientes recortes, hay quienes sostienen que las estimaciones continúan siendo demasiado optimistas. En este sentido, esta semana Aprosoja, una asociación de Brasil que representa a miles de productores de granos, sostuvo que las proyecciones que se han dado a conocer son aun excesivamente altas, y estimó una producción de 135,0 Mt para el ciclo 2023/24, casi 20,0 Mt por debajo del promedio de las demás estimaciones. Esto se debe al estrés hídrico al que fueron sometidos los estados del centro-oeste, como Mato Grosso, Goiás y Mato Grosso do Sul, y al exceso de precipitaciones en zonas de esos mismos estados, que dificultaron las labores de recolección de granos. También hay contundentes informes de productores al sur del país, principalmente en el estado de Paraná, que sufrieron excesos de lluvia al inicio de la siembra, y ahora enfrentan falta de lluvias en zonas donde la soja se encuentra en fase reproductiva.
En este sentido, Aprosoja destacó que la publicación datos sobre la cosecha que no se corresponden con la realidad ha generado una tendencia a la baja en los precios, de manera que los productores, además de haber reducido su productividad, tienen que lidiar con precios incompatibles con la realidad, provocando pérdidas severas.
Mientras tanto, los operadores siguen atentos las novedades respecto de la cosecha del principal país productor de soja del mundo, y los precios en el Mercado de Chicago responden a los cambios en las expectativas. De esta manera, la cotización de la soja entre semanas se mostró a la baja, con un precio de U$S 445,9/t este jueves. U$S 6,5 por debajo de la cotización del jueves previo. Por su parte, el maíz mostró asimismo una tendencia descendente, anotando un precio de U$S 174,8/t este jueves, por debajo de los U$S 180,2/t de la semana previa.
Fuente: Belén Maldonado – Emilce Terré BCR
