El fenómeno de El Niño ha impactado fuertemente en diversas regiones de Argentina, especialmente en la región núcleo, donde se han registrado lluvias que superan ampliamente la media durante el mes de diciembre. Según un informe de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las reservas de agua han experimentado un cambio dramático en tan solo una semana.
Hace poco tiempo, la situación era preocupante debido a la falta de agua que amenazaba la cosecha gruesa, especialmente en el oeste de la región pampeana. La sequía severa afectaba también a otras áreas como La Pampa, el oeste y suroeste de Buenos Aires, gran parte de Córdoba, Santiago del Estero y Chaco.
Estas regiones requerían entre 110 y 140 mm de lluvia para volver a condiciones óptimas. Sin embargo, en los últimos siete días, las lluvias acumuladas han cambiado significativamente el panorama. Ahora, se han registrado excesos de agua en aproximadamente un 20% de la región pampeana, especialmente en el centro y norte de Santa Fe, gran parte de Entre Ríos y el centro y este de Buenos Aires. Incluso en el oeste, la situación ha mejorado considerablemente, con una disminución de las áreas con suelos en rojo que antes ocupaban la franja y parte de la región núcleo, limitándose ahora al norte de Córdoba. Este cambio en las condiciones climáticas indica que la sequía que afectaba a algunas regiones de Argentina ha llegado a su fin, según los expertos. Sin embargo, estos cambios también traen preocupaciones debido a la violencia de los temporales. Se advierte que con la continuación de las lluvias en los próximos días, podría haber excesos de agua en el 50% al 60% de la provincia de Buenos Aires, lo que representa una gran preocupación para los productores de trigo, ya que aún falta por cosechar casi el 80% de la cosecha de trigo.
La incertidumbre sobre si el temporal afectó los cultivos plantea dudas sobre la reciente estimación de producción de trigo de 14,5 millones de toneladas. Es importante destacar que aunque se asocia a “El Niño” con eventos climáticos extremos, como tormentas más fuertes, el consultor de GEA/BCR, Alfredo Elorriaga, aclara que la violencia de los temporales recientes se debe a la gran diferencia de temperaturas entre las masas de aire que entraron en contacto y no directamente al fenómeno de El Niño. El Niño, en sí, no produce tormentas más fuertes, sino que aumenta el ingreso de humedad al sistema.
El comportamiento de las tormentas está influenciado por otras variables que no están directamente relacionadas con el Pacífico. En cuanto a las cifras de lluvia registradas en diciembre, algunas localidades han acumulado cantidades significativamente por encima de la media mensual. Por ejemplo, en El Trébol se han medido 313 mm, casi triplicando la media mensual. En Santa Fe, la localidad de Reconquista ha alcanzado los 357 mm, marcando la cifra más alta de los últimos 63 años.
En conclusión, el fenómeno de El Niño ha provocado cambios dramáticos en las reservas de agua en la región núcleo de Argentina. Aunque estas lluvias han aliviado la sequía en algunas regiones, también han generado preocupaciones debido a los excesos de agua y los temporales violentos. Los agricultores se mantienen atentos a la evolución del clima y esperan que estas condiciones mejoren para garantizar una buena cosecha.
Fuente: BCR