En medio de una de las peores campañas agrícolas de la historia, a raíz de la sequía, el mantenimiento de las retenciones y la brecha cambiaria que siguen perjudicando la economía de los productores, el presidente Alberto Fernández, al referirse a la actividad agropecuaria durante su discurso frente a la Asamblea Legislativa, en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso Nacional, solo se limitó a hablar de buenas noticias del pasado, como el incremento de las exportaciones.
Se trata de hechos que no son mérito de su gestión de gobierno, sino de los productores y de los precios internacionales. Sobre la sequía, más allá de mencionar algunas medidas ya anunciadas por el ministro de Economía, Sergio Massa, nada dijo sobre qué hará para asistir a quienes terminarán en quebranto y no tendrán recursos para encarar la próxima campaña agrícola. Harán faltan más de US$10.000 M para sembrar la nueva campaña, monto equivalente, como mínimo, a la pérdida por la sequía. Fernández no se solidarizó con la enorme cantidad de productores que atraviesan por esta circunstancia.
Instrumentos. El Presidente dijo: “En cuanto al sector agropecuario, el año cerró con las preocupaciones que genera una sequía muy severa que, en mayor o menor medida, viene afectando la producción de trigo, cebada, soja y maíz. Ante estas dificultades climáticas, el Estado ha dispuesto un conjunto de instrumentos para apoyar a los productores más afectados, como lo hacemos con todos los sectores de nuestra economía”.
Y agregó: “No obstante, las exportaciones del sector durante 2022 fueron récord. Se produjeron más de 142 millones de toneladas de cereales, oleaginosas y otros cultivos. En la campaña 2021-2022 el área sembrada fue superior a los 42 millones de hectáreas, un récord histórico”. Este año, en tanto, quedó área sin cubrir por la sequía, admitió.
En 2022, la liquidación de divisas de la agroexportación se ubicó en US$40.438.170.941, 22% más que en 2021, marcando un récord. Pero más que por una producción significativamente superior, ya que el ciclo pasado también padeció la sequía y mantuvo un volumen de soja está estancado, ese monto de exportaciones se logró por los buenos precios internacionales de los granos y subproductos, generosos, salvo durante el primer tiempo de la pandemia, en el gobierno de Alberto Fernández.
No llegaron. Consultado por el diario La Nación, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino dijo: “Me extraña que el presidente haya dedicado tan pocos minutos de su discurso al sector más federal que tiene nuestro país y uno de los pocos que puede contribuir a sacarnos de la crisis que atravesamos como sociedad”.
Y agregó: “Los instrumentos que puso a disposición el Estado para mitigar los efectos de la sequía, no llegaron a los productores. Hablar de récords productivos no es mérito del gobierno sino de los productores que, más allá de las pésimas políticas, de la tremenda seca que atravesamos y de una presión impositiva asfixiante, seguimos invirtiendo y trabajando sin tener un horizonte claro”, remarcó Pino.
Crecimiento. Posteriormente, y si mayores precisiones, el presidente Fernández dijo en un tramo de su discurso que “también se registró crecimiento productivo, en carne bovina y porcina, que alcanzó niveles nunca antes visto”.
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En carne vacuna, en efecto, se exportó por valor de US$3424,2 M, pero también fue por efecto de los precios internacionales del producto. Por el lado del volumen hubo una suba del 9,5%. La política de intervención en la carne, con prohibición para exportar 7 cortes populares y una suerte de “control” no escrito, impidieron un mayor volumen exportado.
En este sentido, cabe destacar que según el Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral), en 2022, el Mercosur subió 16,4% sus exportaciones de carne y la Argentina, con un 18,8% de participación en las operaciones del bloque común, tuvo el registro más bajo de los últimos 3 años.
Regionales. “Trabajamos con todas las economías regionales generando mejores condiciones para sus explotaciones y producciones”, dijo en otro tramo del discurso el primer mandatario.
Al respecto, Coninagro recientemente remarcó que el 90% de las economías regionales estaban en crisis. Sergio Massa prometió un dólar diferencial para esas actividades que nunca se instrumentó y medidas para paliar el impacto de las heladas que llegaron a cuentagotas. Si bien durante el gobierno de Fernández bajaron retenciones a algunas economías regionales, el pedido del agro es que la alícuota sea cero para todas.
En 2022, para muchos productores fue dramático conseguir gasoil en plena cosecha de granos gruesos y en la posterior siembra de trigo. La falta se achicó cuando el gobierno flexibilizó el corte con biodiésel, lo que permitió aumentar el volumen del combustible. Sin embargo, para el Presidente no hubo problemas: “En 2022, a pesar de la brutal alza de los precios internacionales en la energía, nadie se quedó en nuestro país sin gas o sin combustibles. Argentina siguió trabajando y produciendo”, dijo sin ruborizarse.
Logística. Por otra parte, el jefe de Estado habló de los ferrocarriles, donde dijo que se logró un récord de carga transportada con 8,5 M/t en los trenes que administra el Estado.
Y también en materia logística habló del transporte fluvial. “Impulsamos el desarrollo de la Hidrovía, la vía navegable troncal, a través de la creación del Ente Nacional de Control y Gestión, integrando a su administración a las siete provincias argentinas costeras. Durante el primer año de la transición, el Estado obtuvo un saldo positivo de 29 millones de dólares para poder ejecutar obras en la ruta por la que circula más del 80% de las exportaciones argentinas y que impacta en 4500 buques oceánicos al año”.
Leyes. En 2022, Fernández se mostró esperanzado de que en el Congreso se tratara una ley de promoción a la agroindustria que tenía el respaldo privado. Eso no ocurrió y el mandatario incluyó el tema en las últimas sesiones extraordinarias. Pero el tema no se trató, opacado por la embestida del Gobierno contra la Corte Suprema de Justicia.
Al respecto, Fernández pidió no condicionar “la aprobación de proyectos de leyes que los argentinos están necesitando” y, entre otras iniciativas, habló de la promoción de la agroindustria.