Lo encontraron cuando un equipo de la División de Delitos Rurales y Ambientales N°1- Este realizaba recorridos preventivos en un camino próximo a la Ruta 310.
De acuerdo con lo informado por el oficial principal Delfín Valdez, en la tarde del viernes 24 de febrero, personal de la división recorría caminos vecinales en la zona de la localidad de Río Nío, en la provincia de Tucumán.
Los uniformados realizaban controles vehiculares selectivos cuando sorprendieron a tres hombres a la vera de la ruta en plena tarea de faena.
Los infractores tenían partes de un vacuno colgadas de un aparejo y sujetadas de un árbol; alrededor había cuchillos, sierras y otros elementos usados.
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Al consultarles por la procedencia y el destino, uno de los hombres adujo ser dueño del animal, que lo había vendido a uno de los presentes; y que el comprador llevaría la carne a su local comercial ubicada en Villa Padre Monti.
Sin elementos que justifiquen la operación y con el agravante que la faena se hizo en un lugar no habilitado para tal fin; y no reunía las mínimas condiciones de higiene y salubridad; los uniformados secuestraron tanto la carne (con un peso de 100 kilogramos), como los elementos allí usados.De esta manera los secuestros quedaron a disposición de la Dirección de Ganadería Provincial, para ser enviada a un frigorífico habilitado para su inspección veterinaria y posterior decomiso.
Todo lo actuado se informó al director de Ganadería de la Provincia, y desde esa oficina convalidaron los secuestros producidos. Todo lo actuado fue supervisado por el director del Área, comisario general, Luis Castaño.
