Ante el reclamo generalizado del campo, que confluirá hoy martes en Villa Constitución, Santa Fe, a una asamblea convocada por la Federación Agraria Argentina (FAA), desde uno de los organismos más apuntados por los productores, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), se defendieron.
“Nosotros estamos a disposición de los productores, eso queremos que lo sepan. Personalmente no quiero entrar en una disputa ni con ellos ni con las provincias, queremos que sepan que estamos a disposición. La AFIP esta para colaborar”, sostuvo el administrador federal de la AFIP, Carlos Castagneto.
En declaraciones a radio La Red, el funcionario de origen platense, exfutbolista profesional, contador público y peronista dijo: “Estuvimos reunidos con la Mesa de Enlace y sacamos la resolución general 5.524 en la que se establece que se suspenden los anticipos de impuestos a las Ganancias, se suspenden también las ejecuciones de los juicios fiscales y los embargos, también la venta forzosa de hacienda por impacto de la sequía”, explicó Castagneto.
Declaraciones. Hasta el momento la AFIP contabiliza 310 declaraciones de emergencias agropecuaria, 124 declaraciones de desastre agropecuario y 59 pedidos de emergencia por sequía, por parte de productores agropecuarios.
Al respecto destacó que “todo tiene un proceso. A veces parece que todo (el trámite) es del organismo. Yo sé que la AFIP no es un organismo simpático, porque a uno le toca cobrar y eso no cae con simpatía, pero todo tiene un procedimiento”.
Y agregó: “las provincias tienen que marcar la emergencia, en qué zonas y en qué municipios está la emergencia, por sequía o por desastres, y después desde el ministerio de Economía se dicta la resolución y nosotros aplicamos la norma”, explicó el funcionario.
La AFIP recordó que ofrece el servicio de acercar las “oficinas móviles” del organismo hacia los lugares de las producciones agropecuarias, a modo de facilitación logística. “Tenemos un diálogo permanente con la Mesa de Enlace”, destacó Catagneto.
Presión. En tanto desde la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de la Argentina (FADA), organización que monitorea las variables macroeconómicas del campo y la agroindustria, plantearon, en uno de sus últimos informes que, con respecto al trimestre pasado, “la presión tributaria creció un 5,9% y, de este modo, de cada $100 generados en el campo, un 67,2%”, va a las arcas fiscales de municipios, provincias y el Estado nacional.
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David Miazzo, economista jefe de FADA explicó: “Uno esperaría que si la producción baja, sea por sequía o el motivo que sea, la presión de los impuestos también baje. Sin embargo, por la estructura tributaria que pesa sobre la producción agrícola, un evento adverso como la sequía, en lugar de reducir el peso de los impuestos, lo aumenta”, precisó.
Según FADA, la presión impositiva en las provincias agrícolas, respecto del ingreso de los productores es la siguiente: Entre Ríos (69,2%), La Pampa (69,1%), Córdoba (68,3%), San Luis (68%), Buenos Aires (64,8%) y Santa Fe (63,1%).
Mito. No obstante, contraponiéndose a esos datos, Castagneto desestimó la idea que el país sea en el mundo uno de los que más carga tributaria aplica a sus contribuyentes. “Ese es un mito. Hay algunos en los que la presión impositiva es mucho más alta y la Argentina no está entre los primeros países”, consideró.
“Y también, en todas las actividades, estamos viendo que se paga muy poco de IVA, y también en Ganancias, que se paga entre el 4 y el 6%”, precisó. “En este país se tiene que terminar el vivo que dice ‘yo no pago, paga el de al lado’”, opinó Castagneto.
Ante el permanente reclamo de postergaciones de compromisos de pago por parte de productores y entidades, la AFIP salió a defenderse. “No quiero contradecir, pero son leyes que hay que cumplir”, dijo.
“Yo no puedo anunciar una medida así de un día para el otro. Primero que es sistémico, y segundo son leyes: si yo mañana tomo esa decisión por gusto propio, cualquier persona me puede denunciar y yo con todo derecho me como una denuncia penal”, explicó Castagneto.
Molestia. En la AFIP, según señaló el medio Infocampo, existe cierto malestar con los gobernadores. Entienden que son ellos quienes, en determinados casos, no ejercen actúan con celeridad en las declaraciones de emergencia y desastre agropecuario.
“Las entidades se movilizan el martes y entre otras cosas van a plantear este tema. Y nosotros no nos queremos lavar las manos, siempre hemos dado la cara. Carlos ha ido a las reuniones con la Mesa de Enlace, pero nosotros no declaramos las Emergencias Agropecuarias. Ni tampoco Sergio Massa”, se defendieron los funcionarios del ente recaudador consultados por el mismo medio. Y “los gobernadores se hacen bastante los distraídos”, remarcaron.
