El precio cobrado por litro entregado en tranquera se elevó 5,6%, cuando desde la secretaría de Comercio habrían amenazado con frenar exportaciones, si la suba superaba el 4%. En promedio el precio cobrado en enero por litro de leche cruda entregado en tranquera fue $69,98.
Así lo informó el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) sobre la base de los datos cargados en el Sistema Integrado de Gestión de la Lechería Argentina (SIGLEA). En esa plataforma oficial se cargan los datos de todos los contratos abonados por las empresas lácteas a los tambos, siendo por ese motivo un indicador fiel del valor cobrado por los establecimientos productores de leche.
Este precio de casi $70 por litro supone un incremento de 5,6%, con respecto a diciembre, y de 95,4%, con respecto al primer mes de 2022, con lo cual en términos interanuales, apenas si compensa la inflación de 2022 (94,8% según el INDEC).
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“Sugerencias”. Hasta ahora, son solo datos objetivos del sector. Pero al respecto hay que tener en cuenta lo que pasó a findes de enero: desde la industria láctea dejaron trascender la existencia de llamados realizados por la Secretaría de Comercio Interior, que encabeza el economista Matías Tombolini, para presionar por subas de como máximo 4%, amenazando incluso con frenar las exportaciones de lácteos, si se superaba ese porcentaje de incremento en el pago a los productores lecheros.
Esta situación motivó un fuerte reclamo de la Mesa de Enlace que agrupa a las 4 entidades gremiales empresarias del agro. Con los valores ya conocidos, habrá que ver si, tal como amenazó, el Gobierno avanza en los próximos días con una intervención en las exportaciones de leche en polvo. Su idea es que una medida de este tipo puede frenar, de alguna manera, el aumento de precios este producto alimenticio básico, en el mercado interno, en el contexto de una inflación desbocada, motivada por otras causas macroeconómicas.
