Tras la muerte de un chofer, las entidades de la agroindustria alertan por la violencia en los piquetes de camiones

Bolsas de cereales y comercio, y cámaras empresarias de todo el país vinculadas a la agroindustria, además de las entidades que nuclean al transporte automotor de cargas, pidieron prontas soluciones para los problemas que provocan las protestas de transportistas autoconvocados. La muerte de un chofer que fue perseguido y atacado por otros colegas por querer trabajar, en las inmediaciones de la ciudad de Daireaux, en el sudoeste de Buenos Aires, disparó las alarmas de las entidades de la agroindustria.

El lamentable suceso ocurrió en retén de transportistas, donde un chofer falleció luego que su camión fuera atacado a pedradas por los manifestantes y terminara volcando al costado de la ruta. Fue la gota que rebasó el vaso, en un contexto complicado por los perjuicios económicos que genera la protesta nacional motorizada por transportistas autoconvocados, a raíz de la falta de gasoil y los incrementos de precio, y con el pedido de un nuevo incremento tarifario como telón de fondo.

La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) emitió un comunicado de repudio “de manera categórica” por la muerte del chofer en Daireaux: “Consideramos que los hechos de violencia llevan a más violencia y ninguna situación, por más extrema que sea, puede justificar de manera alguna lo ocurrido en la Ruta 65. Reiteramos el pedido urgente para que el Gobierno convoque a las Federaciones con representación, para encontrar una solución a la situación que desde hace más de 60 días venimos denunciando. La posición de esta Federación que nuclea a 44 cámaras de todo el país, integrada por 4.500 pymes, siempre ha sido y será el diálogo y el consenso”, subrayó la Fadeeac.

Esa posición fue apoyada además por la Federación Argentina de Entidades de Transporte y Logística (Faetyl), la Federación de Transportistas Argentinos (FETRA) y la Cámara Argentina del Transporte Automotor de Cargas (CATAC).

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Agroindustriales. La posición de las entidades del transporte fue avalada también por 12 bolsas y cámaras agroindustriales del país. Las Bolsas de Cereales de Bahía Blanca, Buenos Aires, Córdoba y Entre Ríos; las Bolsas de Comercio de Chaco, Rosario y Santa Fe; las cámaras de la Industria Aceitera de la República Argentina, de Actividades Portuarias y Marítimas; de Comercio Industria y Servicios de San Lorenzo y su zona, y de Puertos Privados Comerciales; y el Centro de Exportadores de Cereales, expresaron su “profunda preocupación por los efectos nocivos que está dejando la medida llevada a cabo desde hace casi una semana por transportistas autoconvocados”.

Para las entidades, los piquetes de camiones que se concentran especialmente en la zona del Gran Rosario, otras zonas de la región pampeana, Bahía Blanca y Quequén, impiden el normal funcionamiento de las terminales portuarias e imposibilita que otros transportistas accedan a descargar allí. “La situación aún es más complicada pues, por más que en algunas zonas se haya liberado el tránsito, no se están cargado camiones en origen, por el temor de los transportistas a no poder descargar luego en los puertos”, precisaron.

Las entidades firmantes del documento remarcaron que la medida de fuerza es llevada adelante por grupos de transportistas que no tienen representación institucional. Por eso piden a las autoridades que brinden las garantías necesarias para los transportistas, a fin de evitar hechos fatales como la muerte del chofer en Daireaux.

Números contundentes. “Hoy los datos oficiales que surgen del sistema STOP muestran que casi el 80% de los turnos otorgados por las terminales no fueron activados por los transportistas”, graficó Martín Brindici, Gerente General de la Cámara de Puertos Privados Comerciales (CPPC).

En este contexto, las entidades aclararon que no se cuestiona el planteo vinculado con la escasez de gasoil que “afecta severamente la actividad del transporte y requiere de una solución inmediata”. Pero sí cuestionaron que las consecuencias de los cortes se están agravando a medida que pasa el tiempo, lo que se traduce en números que son preocupantes para el país.

“Al día de la fecha calculamos que han dejado de ingresar a nuestras terminales y fábricas 350.000 toneladas de granos, lo que se traduce, no sólo en un menor ingreso de divisas sino que también estamos comenzando a tener dificultades de abastecimiento de aceite en el mercado interno”, advirtió Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA) y del Centro de Exportadores de Cereales (CEC).

“Puertos sucios”. La protesta genera, también, demoras en los embarques, comprometiendo la reputación del origen argentino ante el mundo, muchas veces cuestionada por medidas como estas. Lo cierto es que se suele calificar al origen argentino como “puerto sucio” por la cantidad de conflictos sindicales sufre, poniendo en riesgo el cumplimiento de obligaciones contraídas en negocios internaciones.

Por su parte, Luis Zubizarreta, presidente de la CPPC, sostuvo que “la solución al problema de fondo, que no lo desconocemos, no está en los cortes de ruta, hay muchos transportistas que quieren trabajar y no pueden. Estas medidas perjudican a todo el país”, remarcó.

Por todo lo expuesto, las entidades agroindustriales solicitaron que “rápidamente se encauce el diálogo con las autoridades y que en una mesa de diálogo las partes involucradas puedan encontrar una solución que normalice lo antes posible la actividad”, porque “la Argentina no puede darse del lujo de frenar una de las pocas fuentes de ingreso de divisas genuinas que tiene”.

Imagen: @CristianBSanz

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