El panorama es cada vez más complejo. La falta de lluvias y las altas temperaturas abren dudas sobre los volúmenes a cosechar. Las estimaciones de la Bolsa de Comercio de Rosario indican que en soja habrá una merma de cinco millones de toneladas que la proyección inicial de la campaña gruesa. Para el maíz se evalúa que la caída será superior al 10%. La Bolsa de Rosario había pronosticado un ingreso de divisas record por todos los granos y subproductos por más de U$S 36.7000 millones.
El temor en el sector es que se repita la caída de más de 30 millones de toneladas entre soja y maíz, ocurrida en 2018 durante el gobierno de Mauricio Macri. En los últimos 35 años hubo tres campañas con Niñas consecutivas y fueron las tres peores campañas de soja y maíz en el país. Se dieron en 2008/2009, 2011/2012 y 2017/2018.
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El efecto Niña sobre Niña provocará una reducción en el maíz que será mayor que la estimada en enero de 2018, según Cristian Ruso de la BCR. El índice ONI que evalúa la anomalía de la temperatura superficial del Pacífico Ecuatorial Central muestra la misma escalada en diciembre de 2017 y diciembre 2021; el valor tomó menos uno. Este indicador significa que la acción de la Niña se sentirá hasta por lo menos el mes de marzo. Las zonas más afectadas son la provincia de Entre Ríos y el centro este de Buenos Aires.
Para el productor Gustavo Grobocopatel, de Los Grobo, la situación actual es parecida a la de 2018. Habrá menos producción y hasta que no llueva no se sabrá cuánto va a ser. Probablemente, va a ser compensada parcialmente por el aumento de los precios.
Según Esteban Copati, jefe de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, todavía no se vislumbra un escenario tan drástico como en 2018. Hay una buena parte del área sembrada bajo riesgo de perderse, pero no todo está perdido. Hay zonas aceptables que acumularon buenos milímetros, incluso en diciembre; por ejemplo el oeste de Buenos Aires, norte de La Pampa y sectores del sur de Córdoba.
Para Pablo Mercuri, director del Centro de Investigación de Recursos Naturales del INTA, hay que esperar. La proporción de siembra de maíz tardío y soja de segunda es mayor que en 2018 y estos cultivos tienen en su sitio fenológico corrida la floración hacia más adelante por lo que el requerimiento de agua va a ser a fin de enero, febrero e inicios de marzo. Sí se han visto afectados los maíces de primera, cuya floración se dio ahora con alta escasez de agua y sequedad y las hojas de primera. También hay que esperar a ver el impacto de la ola de calor, la evolución de los cultivos en estos días y el avance del frente frío que producirá lluvias a principios de la próxima semana. El pronóstico indica que a partir del domingo y hasta el miércoles habrá un alivio por lluvias y descenso de temperatura.