El dólar blue volvió a subir y este lunes cerró a $197,5 para la compra y $200,5 para la venta, sumando 50 centavos desde el viernes pasado.
Desde el jueves viene ganando terreno y según el economista Salvador Di Stefano habrá subas producidas por el impacto del medio aguinaldo, la inflación cercana al 50% y una tasa interés negativa de interés.
Para el economista, el Gobierno no para de emitir lo que provoca el aumento del dólar paralelo. Sumado a la tasa de interés negativa se sigue en el circulo vicioso de mayor inflación y suba de tipo de cambio. Si aumentan la tasa de interés, estaremos estancados, con inflación y devaluación. El problema es la falta de confianza e inversiones.
Di Stefano considera que a fines de diciembre llegará a los $230 para la venta y el camino que inició Estados Unidos, de mutar de una política monetaria con tasas negativas contra la inflación, a fijar tasas de interés que sean neutras frente a las que muestra Argentina, que resultan muy negativas contra la inflación.
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Según advierte el economista, una tasa del 34% anual para un plazo fijo, cuando la inflación del último año es del 52,1% anual, implica una tasa negativa de 18,1 puntos porcentuales. Esa tasa invita al ahorro en dólares y resulta una estafa para el ahorrista en pesos.
Di Stefano aseguró que “la política cambiaria y monetaria del país es muy mala de tal forma que se necesita garantizar un equilibrio fiscal, que si bien es una condición necesaria no debe conllevar un lado sufriente sino mas bien hacia un plan de desarrollo sustentable”.
En su opinión, el gobierno debería alentar las inversiones extranjeras o dar beneficios fiscales a los inversores del país para dinamizar la inversión, generar mas riqueza, hacer crecer el PBI para lograr a futuro mayores ingresos fiscales para el sector público. Para atraer inversiones es necesario un tipo de cambio alto y libre y disponibilidad de dólares para remesar utilidades.
En ese sentido, Di Stefano apuntó que el gobierno deberá ajustar el dólar oficial a la suba, de lo contrario habrá una disminución de liquidación de exportaciones y la brecha no bajaría de los niveles del 80 al 100% por la falta de confianza.