Los gusanos blancos (Dilobderus abderus Sturm) han ido incrementando su presencia en la zona centro sur de la provincia de Entre Ríos. Se recomienda monitorear la situación antes de sembrar cultivos y verdeos invernales (como trigo y avena), pasturas e incluso cultivos estivales de siembra temprana, como lo son el maíz y el sorgo. En poblaciones de baja densidad otorga beneficios en la mejora de la infiltración del suelo (por sus galerías) y en el reciclado de nutrientes. Por esta razón se debe respetar el umbral de daño y no realizar aplicaciones preventivas insecticidas que alteren la actividad de la fauna benéfica del suelo. Los daños que se observan, cuando la densidad poblacional es alta, es marchitamiento y secado de plántulas, resultando en rodales o manchones sin vegetación, y la disminución productiva de las plantas sobrevivientes. El ciclo de vida es de un año, pasando por los estados de huevo, larva, pre pupa, pupa y adulto. Siendo este último, en el cual lo identificamos como “bicho torito”.
¿Qué observar?
1) Presencia de manchones o rodales sin vegetación.
2) Presencia de montículos de tierra, principalmente luego de una lluvia. En este punto diferenciar si se trata de montículos correspondientes a gusano blanco o a grillo subterráneo (ver Fig. 2 y 3)
3) Observar las características de la larva, para reconocer si es Dilobderus abderus, que es la más dañina, o si se trata de otra especie, para esto:
4) ¿Cómo medimos?
Realizar pozos de 25cm x 50cm de superficie (1/8 m2 ) de 30 cm de profundidad procurando tener una distribución uniforme del lote. Se sugiere realizar unos 10-15 pozos al azar, cada 40 hectáreas. En cada pozo obtener una muestra de suelo, en la cual debe realizarse la observación de toda la tierra mediante un desterronado manual y registrar la totalidad de larvas de gusanos blancos presentes, para luego obtener el número de larvas/m2 (para esto, multiplicar por 8 el promedio obtenido de larvas). Se recomienda realizar este monitoreo previo a la siembra, pero no muy anticipadamente.
5) ¿Cuándo tenemos un nivel de población que puede significar un daño al futuro cultivo?
Para cereales de invierno, el umbral de daño económico es de 5 a 6 larvas/m2. Con niveles poblacionales por encima de 20 larvas/m2, se sugiere no sembrar cultivos de invierno y destinarlo a cultivos de verano para forraje siempre y cuando las siembras se realicen luego del mes de noviembre.
6) ¿Cómo bajo el nivel poblacional de gusano blanco (Dilobderus abderus)?
Fundamentalmente a través del laboreo del suelo, ubicando el mismo de forma estratégica para reducir la oviposición (desde diciembre hasta fines de marzo), o exponiendo las larvas al consumo de aves insectívoras (desde abril a noviembre). Usar insecticidas curasemillas, o en segunda instancia aplicando insecticidas antes de una lluvia, siendo esta última práctica de menor efectividad. Los principios activos y dosis deben ser recomendados por un profesional agrónomo.
Fuente: INTA por Yanina Gisela Gorelik Zonis