Fuente: cronista.com | Por: Julián Sotovitch
Según el balance cambiario de mayo, la posición vendida del BCRA en futuros a finales de mayo fue de u$s 2860 millones.
Aunque dejó de incrementar fuertemente la posición vendedora en mercado de dólar futuro , sin embargo los saldos siguen siendo elevados.
Incluso con cepo cambiario muy duro y con una importante represión nanciera en los mercados cambiarios, el BCRA se encuentra cerca del límite de su posición vendedora impuesto por el FMI y muy lejos de su posición comprada de u$s 3000 millones que mostraba su hoja de balance hace exactamente un año.
Desde comienzo de mes hasta el último dato disponible, el BCRA logró acumular u$s 588 millones en reservas. En la primera quincena de junio el BCRA estuvo comprando divisas en el mercado cambiario, aunque dicha tendencia cambio y el Banco Central pasó a tomar una postura más vendedora.
El problema que miran los analistas es que, de a poco, se está acabando la temporada alta de liquidación de la cosecha, por lo que el mercado cambiario tendería a hacerse mas estrecho en las próximas semanas, algo que podría generar aun mas volatilidad en el tipo de cambio u obligar al BCRA a incrementar su posición vendedora en el mercado spot o en el de futuros.
Mateo Reschini, head de research de LBO remarca el hecho de que se está terminando el período alto estacional de oferta de dólares y aun con restricciones al BCRA le está empezando a costar no vender dólares.
Reschini explica que si bien nunca puede estar seguro la posición del BCRA hasta que llegue posteriormente el dato consolidado,
sí se ve que desde mediados de mayo, cuando comenzaron a ser más fuertes los controles, el interés abierto crece pero a un ritmo
más tranquilo.
“En los últimos días el BCRA estuvo vendiendo y en el stock anual se ve que hay una compra neta cercana a cero. Se ve bastante cómo baja el crecimiento del interés abierto, a la vez que se observa que en el último mes expiró muy poco la cantidad de contratos, sin que baje significativamente la cantidad de contratos abiertos.
En lo que respecta del mercado de futuros, el BCRA redujo el ritmo de acumulación de posiciones vendidas en futuros de dólar aunque el stock total sigue siendo elevado.
A finales de mayo, la posición vendida en futuros fue de u$s 2860 millones. Esto se da incluso en un período en el que el BCRA suele acumular u$s 900 millones en promedio gracias a la liquidación estacional alta de divisas provenientes de la cosecha.
En otras palabras, el BCRA no aumenta su posición tanto como antes pero no disminuye la que ya tiene y en algún momento esto puede llegar a complicarse. Habrá que ver si el BCRA apunta por mayor regulación o poner un precio más alto en el tipo de cambio ”, dijo Reschini.
Jorge Fagnani, Analista Senior de Estrategia de Cohen advierte como preocupante el hecho de el BCRA es la única parte vendedora en el mercado contra aquellos que buscan cubrirse contra posibles subas del dólar en el futuro
“Nos encontramos en meses que históricamente son beneficiosos para la balanza comercial del país. Sin embargo, este año tiene en parte su propia dinámica de la mano de distintos factores que también contribuyen a la demanda de divisas”, consideró.
Si bien el número de contratos abiertos, “no necesariamente llama la atención comparado con otros momentos del país, y tampoco vemos una aceleración, durante el último mes, en el ritmo en que se abren contratos de ROFEX, lo que preocupa que sea el Estado prácticamente, la única contraparte a aquellos que buscan protegerse de subas en el tipo de cambio”, dijo Fagnani.
Julio Calcagnino, analista de mercados de TSA Bursátil del Grupo Transatlántica destaca que los efectos estacionales de acumulación de divisas en torno a la cosecha se vieron notablemente mermados este año.
Por un lado, por venta de stocks provenientes de una campaña afectada por la sequía previo al aumento de las retenciones , y por el otro, por la aversión al riesgo que genera el contexto global y local y la politica monetaria fuertemente expansiva que lleva adelante el gobierno de Alberto Fernández .
Según Calcagnino, este combo de factores llevó al BCRA tanto a la venta de reservas e imposición de nuevos controles cambiarios, como a la venta de futuros para evitar que el mercado futuro comience a convalidar expectativas de depreciación más marcadas junto a la esterilización del financiamiento monetario al Tesoro.
“En este contexto, el Central utiliza su combo de herramientas para evitar cualquier movimiento disruptivo en el mercado de cambios en un contexto de cuarentena y con la novela de la restructuración pendiente de resolver”, consideró.
En concreto, el BCRA se encuentra a un 15,4% del límite de venta de futuros que el FMI le jara al gobierno de Mauricio Macri , y lejos de la posición comprada de u$s 3000 que exhibía la institución a mediados de julio de 2019.
Ahora sin los límites del FMI, ya sea por abandono del plan anterior o flexibilidad coyuntural del organismo, el BCRA podría continuar vendiendo futuros a la espera de un plan monetario consistente post pandemia y la resolución del tema deuda , dado que aún se encuentra lejos de la posición de u$s 18.000 millones que supo tener en 2015, dijo el especialista.
Posición histórica
La posición de dólar futuro vendida con la que cuenta el BCRA es elevada aunque lejos del máximo que se registraba en la época de Alejandro Vanoli como presidente de la entidad, en 2015, cuando llegó a tener cerca de u$s 14.000 millones vendidos en dólar futuro.
En cuanto a la posición vendida de dólar futuro actual, los analistas de Quinquela Fondos consideran que en el contexto actual y bajo las nuevas regulaciones, el BCRA no necesita una posición tan agresiva en el mercado de futuros.
“La decisión de intervenir en el mercado de futuros se suele tomar buscando que diferentes empresas vendan divisas en el mercado spot y tomen coberturas en el mercado de futuro. De esa manera logran generar oferta presente sin necesidad de desprenderse de reservas”, comentaron los analistas de Quinquela Fondos.
Siempre es bueno recordar que esas operaciones se cierran en pesos y no en dólares. Por lo tanto, hipotéticamente, es emisión futura y no pérdida de reservas. “En el contexto actual, con el mercado más equilibrado por las nuevas regulaciones que acotaron la demanda, posiblemente no sea necesario ese incentivo”, pronosticaron en Quinquela.
Si bien la oferta estacional este año fue más acotada que en años anteriores por el volumen de ventas que se cerraron antes del cambio de gobierno, hacia las próximas semanas, en Quinquela Fondos esperan que podría empezar a atenuarse la oferta de dólares del sector agropecuario, en la medida que pasa el pico estacional.
“En ese marco, el desequilibrio del sector externo recién podría producirse cuando se recupere la demanda interna en el proceso post pandemia. Hasta ese momento, el BCRA seguiría manejando el mercado con las restricciones actuales y posiblemente no necesite mayores volúmenes de intervención en el mercado de futuros que los que tuvo hasta ahora”, dijeron desde la compañía.
Cuidando las Reservas
De alguna u otra manera, lo que busca hacer el BCRA es cuidar las reservas, las cuales en términos netos se encuentran debajo de los u$s 10.000 millones.
En un contexto en el que el tema de la deuda sigue sin resolverse, con contracción del comercio internacional y con un mercado de capitales global cerrado, resulta clave para la entidad financiera preservar al máximo posible los billetes que quedan en poder del Central.
El economista Martin Polo entiende que hacia adelante, el BCRA va a tratar de exprimir todos los instrumentos que pueda con tal de no sacrificar reservas. En tanto y en cuanto los mercados internacionales se mantengan volátiles y no llegue un acuerdo sobre el tema de la deuda, el mercado cambiario va a estar presionado.
“Hay que tener en cuenta que en junio aumento la liquidación de las exportadoras y el BCRA solo pudo comprar en la primera quincena. En la segunda, estuvo mas acotado. El mercado cambiario no da la perspectiva de que tiene sobrantes y hay una tensión continúa y en la que las expectativas de devaluación siguen presionando a dicho mercado y una de las formas de canalizar dichas expectativas es a través del mercado de futuros”, explicó Polo.
Hacia adelante Jorge Fagnani, Analista Senior de Estrategia de Cohen considera que esta dinámica puede complicarse aún más, si la Reestructuración de la deuda no se resuelve, si continúa creciendo la base monetaria y si vemos una subida en el nivel de precios al momento en que se abra la cuarentena.
Además Fagnani remarca que algo que podemos esperar que ocurra a partir de septiembre, mes en que justamente comienza a escasear los dólares del campo. Todos estos factores contribuirán a una mayor presión en el tipo de cambio, mercado al que el gobierno ya desgasto con un batallón de medidas.
Fuente: cronista.com | Por: Julián Sotovitch