La falta de precipitaciones comienza a hacerse acuciante en grandes partes del área triguera nacional, a medida que los cultivos transitan importantes etapas de definición de rindes. El frente tormentoso que pasó durante el fin de semana pasada no trajo los milímetros esperados, y el panorama se torna complejo, sobre todo para zonas de Córdoba, La Pampa y Provincia de Buenos Aires.
Según informó la Guía Estratégica para el Agro (GEA), las lluvias quedaron muy lejos de las expectativas. En Buenos Aires, solo alcanzaron al 20% del área con 15 a 30 mm. Además, buena parte del área núcleo del país recibió más granizo que agua. El evento abarcó a muchas localidades del centro sur santafesino y el noreste bonaerense pero, por suerte, no habría daños de gran importancia para los cultivos.
La humedad del suelo en la capa superficial (0-1,6 m) en la provincia de Buenos Aires, por caso, se ubica en los niveles mínimos en cinco años. Esto es especialmente importante si tienen en consideración que esta provincia concentra cerca del 40% de la superficie sembrada con el cereal.
En su último informe de Seguimiento de Cultivos, GEA refleja que el estrés hídrico impacta con pérdidas de entre el 10% y el 40% en el rinde. La escasez de lluvias en el centro-sur santafesino le puso un techo al potencial con estimaciones de un 10-15% caída en el rinde por más de que aparezcan las precipitaciones. Hacia el sur de Santa Fe, oeste bonaerense y este cordobés, las pérdidas trepan del 20 %al 40%, y pueden agravarse si se mantiene el clima seco. El 25% de los cultivos están en condiciones regulares, un 30% en condición buena y un 45% muy buenos. Sin embargo, con pronósticos desfavorables para las próximas semanas, los lotes muy buenos sufrirán un gran impacto, ya que no podrán expresar en rinde la gran cantidad de macollos que formaron con el clima frio.
Los pronósticos tampoco son alentadores. Las bajas temperaturas con las que comenzó octubre son un mal indicador para prever que se revierta la falta de lluvias en el corto plazo. Se espera que el nivel de precipitaciones se mantenga por debajo de los rangos normales para el período hasta fines de la próxima semana.
Reflejando el traspié productivo, el precio del trigo de nueva campaña continúa con la recuperación iniciada a principios de septiembre, cuando el futuro de trigo diciembre con entrega en Rosario llegó a cotizar a US$ 152/t, para cerrar al día jueves 3 de octubre en US$ 166/t.
En el segmento disponible, el precio de pizarra de la Cámara Arbitral de Cereales de la BCR mostró una importante caída en la última semana. Esto se debe a que los operadores ya están esperando el arribo al mercado de los primeros lotes que se cosechan en la región norte del país durante las próximas semanas. En moneda nacional, el precio cayó desde los $ 12.200/t del jueves 26/9 a $ 10.700/t el día de ayer, lo que implicó una pérdida del 12,4%. En dólares, el precio pasó de US$ 214,3/t a US$ 186/t, mostrando un descenso del 13,2%.
Cabe resaltar también la menor demanda del sector exportador. Analizando los datos de las Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE), se observa que se llevan comprometidas 106 mil toneladas para embarcar en el mes de octubre mientras que a igual fecha del año pasado se habían registrado DJVE por más de 370 mil toneladas para ser embarcadas en ese mes. Además, para despachar en el mes de noviembre se llevan declaradas 202 mil toneladas, mientras que en 2018 ese registro superaba las 450 mil toneladas.
En el recinto del Mercado Físico de Granos de la BCR, la actividad comercial por el trigo se redujo respecto a la semana anterior. La mayor parte de la actividad que concentra en la posición con entrega en enero, que alcanzó los US$ 168/t en el transcurso de la semana. En el segmento disponible, el empalme de cosecha se refleja en las ofertas de compra que cayeron al orden de los US$ 160/t en el día de ayer desde los US$ 210/t que se propusieron la semana pasada.
Panorama Internacional
El día lunes 30 de septiembre, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, publicó simultáneamente dos informes que revestían especial importancia para el mercado de trigo. Por un lado, se publicó el informe trimestral de existencias en los Estados Unidos al primero de septiembre, y por el otro el reporte de Granos Finos, con la estimación de producción total de trigo (ente otros cultivos) en el 2019 para ese país.
En el informe “Grain Stocks”, USDA estimó los stocks de trigo totales en los Estados Unidos al primero de septiembre en 64,9 Mt, casi 2 Mt por encima de lo esperado por los analistas en la previa al informe, y en niveles similares a los de la campaña previa para la misma altura del año. Los menores stocks a los esperados que se presentaron tanto para el maíz como para la soja, principalmente para el primero, terminaron por generar el alza en los precios del trigo, aun a pesar de los stocks sorpresivamente altos para este.
En cuanto a la producción total para el año 2019, USDA estimó la misma en 53,4 Mt entre todas las variedades producidas en ese país; esto estuvo en línea con lo que esperaban los agentes, y más de dos 2 Mt por encima del resultado de la campaña pasada.
En su informe, USDA aclara que su estimación de producción está sujeta a revisión, dado que al momento de realizar la encuesta a los productores, aún restaba por cosechar una importante área de trigo de primavera. El Servicio Nacional de Estadísticas Agrícolas (NASS por sus siglas en inglés) volverá a contactar a los encuestados al final de la cosecha y, si los datos recopilados justifican cualquier cambio, NASS actualizará las estimaciones en su informe de Producción de Cultivos del 8 de noviembre. Las estimaciones de existencias también están sujetas a revisión, ya que el trigo que no se han cosechado aún está incluido en la estimación de los stocks en campo (“on-farm”).
A la par que finaliza la cosecha del trigo primaveral en Estados Unidos, que registraba un 90% de avance a fecha del domingo pasado, la siembra del trigo de invierno de nueva campaña avanza a paso firme. Las copiosas lluvias de las últimas semanas sobre las zonas trigueras complicaron el avance de la cosecha, pero prepararon el terreno ideal para poder avanzar con la siembra del trigo nuevo; así la campaña se acompasó en relación al promedio de los últimos años, y lleva ya un ritmo de avance sobre el 38% del área prevista. La estimación de producción de trigo de campaña 2019/20 para los Estados Unidos es de 53,9 Mt, según el Departamento de Agricultura de ese país.
El precio del trigo en Chicago presentó una suba de 1,3% en la semana que terminó el jueves 3 de octubre, cerrando el contrato diciembre en US$ 180,23/t.
En cuanto al panorama para el principal exportador mundial del cereal, Rusia, la cosecha se encuentra próxima a finalizar y el ciclo comercial avanza con buen ritmo. Las estimaciones productivas se mantuvieron sin variaciones en el último informe del Ministerio de Agricultura de ese país; Rusia espera producir en la campaña un total de 78 Mt de trigo. A la fecha, se estima que se ha cosechado el 90,5% del área, generando 73,6 Mt de trigo que ira ingresando al mercado paulatinamente. Este avance se encuentra por delante de lo que fue la campaña pasada para esta altura del año (66,3 Mt).
La estimación oficial de exportaciones sigue manteniéndose 36 Mt, ligeramente por encima de los 35,2 Mt que exportó en la campaña previa. El ciclo comercial ha comenzado de buena forma en este país, habiéndose exportado en entre el 1 de julio y el 23 de septiembre 10,5 Mt, según datos oficiales del ministerio. Este es un valor alto en términos históricos, aunque se encuentra retrasado con respecto a la campaña pasada en poco más de un millón de toneladas.
Fuente: Blas Rozadilla – Javier Treboux BCR