Para esto, Mauricio Macri firmó ayer un decreto por el cual supedita el beneficio de reintegro de aranceles, a que primero las empresas ingresen las divisas al país. Se trata de la devolución de las tarifas y la tasa de estadística que pagan las empresas cuando ingresan al país bienes intermedios e insumos o materias primas que participan del proceso productivo local, y luego se exportan. El perfil de la medida supone que afecta a exportadores del sector industrial, no tanto al sector cerealero, que es el más importante en su conjunto como proveedor de dólares. Pero se trata de una señal más del Gobierno hacia las cerealeras que se muestran reticentes a descargar sus divisas en la plaza local.
Fuente: Ambito.com | Por: Carlos Lamiral