La empresa cordobesa Prodeman se convirtió en la primera de maní en cargar en tren en origen: realizó su primer envío de 35 contenedores en General Cabrera (Córdoba) en el NCA con destino al puerto de Rosario. El próximo sábado hará otro operativo similar y por semana moverá unas 1500 toneladas por ferrocarril.
Oscar Cavigliasso, fundador y propietario de la empresa que exporta casi el 90% de su producción, explicó a LA NACION que esperan transportar el 70% de sus cargas en tren y el resto en camión (en especial las de productos terminados que van directo al puerto de Buenos Aires , ya que son más delicados y tienen una alta diversidad de destinos).
“El ahorro de costos es importante; varía de un producto a otro y por el tamaño del contenedor; además nos permite desocupar camiones para darle otro destino”, graficó.
NCA -del que Aceitera General Deheza es propietaria de una parte- carga, habitualmente, maní en Las Perdices, pero Prodeman pudo cargar frente a su planta por contar con máquinas que usan para el sistema de secado y que se emplean ahora también para subir los contenedores a los vagones. La empresa construyó una alcantarilla de 100 metros para evitar problemas.
“Mi ilusión fue siempre cargar en tren porque el mundo se mueve así; lo vemos cuando viajamos porque a este producto hay que salir a venderlo, conseguir los mercados; es diferente a la soja o al maíz”, apuntó Cavigliasso.
El 25% de la producción de la empresa sale terminada. “Trabajamos para ser el supermercado del mundo, pero todavía hay que corregir algunas cosas a nivel país. Para el sector el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea es clave porque no tenemos libre comercio con casi nadie, mientras Chile lo registra con 60 países. Estuvimos a punto de ir a poner la planta allí por ese motivo, por el diferencial de impuestos”, describió el empresario.
Los productos, bajo la marca “Maní King”, vienen ganando presencia no solo en el mercado interno, sino en Sudamérica. Ahora el foco de la expansión está en Europa, Asia y Oceanía.
La empresa cuenta con una planta de generación de energía eléctrica alimentada a cáscara de maní, una inversión que le dio una solución ambiental a la producción y, además, genera energía que vende a la red nacional.
Fuente: La Nación | Por: Gabriela Origlia
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