En este trabajo se presentan recomendaciones para la implantación del cultivo de trigo durante la campaña triguera 2019 – 2020
En la campaña agrícola de trigo 2018/2019 se alcanzó a nivel nacional según estimaciones del Ministerio de Agroindustria de la Nación la superficie implantada fue de 6.169.085 has., se obtuvo una producción de 19.191.334 de tn., con 3.244 kg.ha.-1 de rendimiento promedio. En la provincia del chaco se implantaron 118.347 has., se cosecharon 117.427 has, con una producción de 226.310 tn. y 1.927 kg.ha.-1 de rendimiento promedio.
Las estimaciones de siembra para la próxima campaña triguera son optimistas dado que consideran que habrá un incremento del área dedicada al cultivo que podría alcanzar los 6.400.000 has. Atribuyen este incremento a los excelentes niveles de reservas de humedad edáfica que presentan los suelos de las distintas regiones. Los trabajos realizados en las campañas 2015, 2016 y 2017 en el INTA E.E.A.
Las Breñas en el marco de proyectos de alcance nacional como regional, permitieron evaluar cultivares de trigo de ciclo largo, intermedio-largo, intermedio-corto y corto, los resultados obtenidos se presentan en las tablas 1 y 2. En base a la información obtenida en estos ensayos se determinan los cultivares más recomendables para la siembra en cada campaña triguera.
RECOMENDACIONES:
En la presente campaña triguera cuando se decida sembrar trigo el INTA E.E.A. Las Breñas le sugiere que tenga en cuenta los siguientes aspectos:
- Elección del lote, considerando el cultivo antecesor, cantidad de rastrojos, población de malezas y tipo de suelo (preferentemente los arcillo-arenosos).
- Elección de cultivares recomendados para la zona según fecha de siembra óptima, así como adaptación al ambiente y comportamiento ante enfermedades. Estos factores le permitirán aprovechar el elevado potencial de rendimiento de los cultivares. En general, de acuerdo con los resultados de los ensayos en las últimas campañas realizados en la E.E.A. Las Breñas, los cultivares de ciclo intermedio o intermedio-largo han obtenido los rendimientos potenciales más elevados.
- Realizar el análisis químico del suelo antes de siembra, para conocer el contenido de nitrógeno.
- Preparar con anticipación el terreno controlando las malezas o plantas guachas del cultivo anterior, logrando un barbecho químico mínimo de 90 días, esto permitiría tener una buena acumulación de agua en el suelo.
- Decidir la siembra siempre y cuando se cuente con humedad en el suelo hasta una profundidad de 1 metro.
- Sembrar los cultivares en las fechas y con la densidad de plantas por metro cuadrado recomendadas. Tratar la semilla con fungicidas para protegerlas contra hongos del suelo.
- Proteger al cultivo contra el ataque del pulgón verde de los cereales, los primeros 60 días.
- Hacer controles de malezas, teniendo en cuenta cuando se apliquen herbicidas hormonales que el momento de mayor resistencia del trigo se encuentra entre 4 o 5 hojas hasta el comienzo de encañazón (cuando se detecta el primer nudo).
- Las enfermedades foliares del trigo más frecuentes son la roya anaranjada (Puccinia triticina), la septoriosis (Septoria tritici) y la mancha amarilla (Drechslera tritici repentis). Las condiciones ambientales que favorecen las infecciones por manchas foliares son temperaturas entre 10 a 30 ºC, alta humedad relativa durante 48 hs. o más y períodos prolongados de rocío. En general, el momento para efectuar las pulverizaciones es en estado de hoja bandera con lígula visible (Z 3.9). 10- Agregado de valor: para mejorar la rentabilidad en la producción de trigo es posible adoptar prácticas de agregado de valor en origen. Un primer paso para alcanzar este objetivo será cuidar la calidad del grano.
Es importante recodar que al elegir el cultivar se deberá tener en cuenta su comportamiento sanitario, grupo de calidad y rendimiento obtenible, esto nos dará mayor seguridad de cosecha. Según el ciclo de las variedades comerciales evaluadas es esperable mayor seguridad de cosecha implantando el cultivo en los siguientes períodos de siembra (tablas 2 y 3):
Fuente: INTA por Mario Francisco Gallego