Casi un centenar de barcos se encontraban demorados el viernes en el puerto de Rosario, el principal polo agroexportador de Argentina, por una protesta de transportistas que lleva más de una semana, dijo un portavoz de un grupo de la industria.
La cantidad de barcos demorados ascendió a 93 el viernes desde alrededor de 60 el jueves, dijo a Reuters Andrés Alcaráz, portavoz de la cámara de exportadores de granos y aceiteros CIARA-CEC, que cuenta entre sus miembros a empresas como Cargill , Louis Dreyfus y Bunge.
Dueños de camiones de transporte iniciaron la semana pasada una medida de fuerza que limita el tránsito de vehículos con granos para abastecer a las empresas que procesan y exportan soja, maíz y trigo y sus derivados en uno de los mayores proveedores globales de alimentos.
La protesta, en reclamo de que el Gobierno fije tarifas de transporte obligatorias, también afecta la actividad de las plantas de molienda en Rosario, desde donde se embarca el 80 por ciento de las exportaciones agroindustriales de Argentina.
El Ministerio de Seguridad de la Nación informó el viernes que Gendarmería detuvo a 12 camioneros “acusados de utilizar métodos extorsivos” en Carlos Casares, una localidad de la provincia de Buenos Aires, y de arrojar una gran cantidad de granos desde los camiones sobre el camino.
“Además se secuestraron siete camiones, cuatro autos y una moto”, informó el ministerio en un comunicado.
El país sudamericano es el principal exportador mundial de aceite y harina de soja y el tercer proveedor global de porotos de soja y de maíz.