El estrés hídrico y las altas temperaturas reducen la proyección de producción de soja
Como se mencionó en informes previos, para el cultivo de soja, las altas temperaturas y el déficit hídrico prolongado han generado estrés termo-hídrico, afectando principalmente al NEA, y en menor medida al NOA y Centro Norte de Córdoba. Estas condiciones adversas han impactado significativamente en el stand de plantas y en el crecimiento de estructuras reproductivas, disminuyendo el potencial productivo en un 22%. Por el contrario, lluvias registradas entre fines de febrero y principios de marzo en el centro de la región agrícola han impactado de manera favorable tanto en los planteos de primera como en las sojas de segunda.
Te puede interesar
- Pronóstico de lluvias hasta el 31 de marzo
- Milei: “Queremos eliminar el cepo y las retenciones para siempre”
-
El Impacto de las tasas municipales en la producción agropecuaria
-
Las exportaciones a lo largo y a lo ancho del país: un 2024 de recuperación
- El mensaje de Luis Caputo que esperanza al agro: “En el ranking de baja de impuestos, el campo está arriba de todo”
En los primeros favoreciendo el llenando grano, mientras que en los de segunda a partir de la formación de vainas. Esta situación ha superado nuestra proyección inicial de rendimiento para la región central, si bien no logra compensar la caída en el norte del área agrícola, ha evitado una mayor disminución de producción. Bajo este contexto, se ha reducido nuestra proyección de producción en 1 MTn, llegando a 48,6 MTn.
Fuente: Bolsa de Cereales de Buenos Aires