Los beneficios de los sistemas silvopastoriles en la Argentina
Los sistemas silvopastoriles combinan árboles, pasturas y animales, generando interacciones benéficas para la producción ganadera. Recientes investigaciones del INTA, realizadas en 13 provincias argentinas, han demostrado el impacto positivo de estos sistemas, particularmente en condiciones de sequía.
El estudio revela que los árboles no solo mejoran la calidad del suelo, sino que también favorecen el crecimiento de las pasturas. Esto es crucial en un contexto donde la falta de agua puede poner en riesgo la productividad ganadera. Gracias a las raíces de los árboles, la estructura del suelo se mejora, incrementando su capacidad para retener agua y nutrientes, lo que a su vez beneficia al ganado que las consume.
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Pablo Peri, coordinador del programa nacional forestales del INTA, subraya que una adecuada comprensión de estos sistemas ante eventos de sequía permitirá optimizar las prácticas ganaderas actuales. Los resultados sugieren que los sistemas silvopastoriles son más resilientes en comparación con los sistemas tradicionales de pastoreo, presentando una mayor producción forrajera incluso bajo condiciones climáticas adversas.
En conclusión, la implementación de sistemas silvopastoriles en Argentina no solo aborda desafíos ambientales, sino que también potencia la productividad ganadera y promueve un equilibrio ecológico, beneficiando a todos los involucrados en el sector agrícola.