Así lo determinó un análisis realizado en el marco del primer mapa de calidad de soja de Argentina, llevado a cabo por un equipo de especialistas del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). El relevamiento evidenció que el contenido de proteína en el NOA fue del 38 %, mientras que el valor medio de proteína en el resto del país fue de 36,6 %.
Conocer el porcentaje de proteína, aceite y profat (contenido combinado de grasa y proteína) es crucial para el complejo agroindustrial, en particular, debido a la relevancia de la harina de soja en la alimentación animal. Por esto, un equipo de especialistas del INTA, con el apoyo de la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (ACSOJA), estudian muestras de soja de campos de productores de todo el país y analizan su calidad. Los resultados generan el mapa de calidad de soja de Argentina, producto que aporta información esencial para posicionar la harina de soja en los mercados internacionales.
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Existen factores que influyen en la calidad nutricional y el contenido de proteína de la soja, tales como el genotipo de la soja, tipo de suelo, manejo de cultivo (fecha de siembra, fertilización, rotaciones, etc.), y condiciones ambientales como temperaturas y régimen hídrico. Oscar Tamayo, especialista del INTA Salta, indicó que actualmente se están analizando más de mil muestras de la última campaña nacional, profundizando en el análisis de calidad del grano en función del ambiente, variedad y prácticas agronómicas.
Con base en los resultados y la experiencia de interacción público-privado, el INTA oficializó la creación de la red de calidad de granos y sus derivados de cereales y oleaginosas. Esta nueva red proporcionará información nacional sobre la calidad de los granos de soja en diversas zonas productoras, lo que contribuirá a mejorar el valor añadido y la competitividad de los granos y sus derivados en los mercados internacionales.
Fuente: INTA Informa