En medio de las dificultades para importar todo tipo de productos por la escasez de dólares, hasta fin de año el campo tiene un requerimiento de unos US$1754 millones para traer del exterior insumos agrícolas, según estimaciones de fuentes del mercado, citadas por el diario La Nación.
Se trata de insumos críticos para que los cultivos expresen todo su potencial y estén protegidos ante enfermedades o plagas como fertilizantes, fitosanitarios formulados y materias primas para elaborar esos productos.
Los problemas de las habilitaciones para importar persisten y, en este sentido, se espera que lo que pueda ingresar “dólar soja” 5 -que empezó a regir esta semana- se destine a cancelar compromisos del sector privado. Por el nuevo programa, que reconoce una liquidación en un 75% al tipo de cambio oficial y otro 25% de libre disponibilidad, el Gobierno espera un ingreso mínimo de unos US$2500 M.
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Fertilizantes. La Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos (Ciafa), consultada por el mencionado medio, dio un panorama de la situación actual del suministro de fertilizantes, especialmente con vistas a la siembra de maíz que requiere de este insumo.
“Más allá de que la fluidez de las SIRA (Sistema de Importaciones de la República Argentina) sigue siendo lenta, se suma la reprogramación de pago y la imposibilidad de pagar en función a lo establecido cuando salió o fue otorgada la SIRA. A su vez, se suma el impuesto PAÍS y el CEF (Capacidad Económica Financiera) también está afectando. Por otra parte, la relación con los proveedores se complejiza, ya que se dificulta cerrar nuevos negocios cuando no se puede pagar lo que se debe. Estamos retrasados con la importación, hay que avanzar ahora para llegar en tiempo y forma (con la mercadería para la campaña)”, explicaron.
Por su parte, Eddy Fay, consultor, detalló que la importación se encuentra “difícil”. Y añadió. “Aún más difícil que la primera mitad del año. Hay dos incertidumbres: una que aprueben el sistema de importaciones SIRA, segundo que el Banco Central te habilite el pago vía Mercado Único de Cambios (MULC)”, detalló.
De las mejores. Según Fay, otra cosa que se observa es que los importadores buscan evitar quedarse con mercadería hacia fin de año, “ya que no se sabe cuál será la carga impositiva del próximo gobierno, sea cual sea”. Al respecto analizó que “la incertidumbre es peor que la mala noticia y en esto se refleja. Si fuera productor, trataría de aplicar alta tecnología para esta siembra, de maíz o soja, ya que las condiciones (insumo/producto) están cerca de las mejores de los últimos tres años”, sugirió.
Según distintas fuentes del mercado citadas por La Nación, para todo 2023 se había definido una necesidad de importar materias primas para fitosanitarios por US$1405,4 M. De ese monto, hasta fin de año, resta que llegue mercadería por unos US$550 M.
En cuanto a los productos fitosanitarios formulados ya terminados, de US$652,4 M resta la llegada de insumos por unos US$330 M. Y de fertilizantes resta ingresar al país mercadería por US$874 M, de los US$1526,5 M, que el rubro preveía ingresar este año.
