En el primer cuatrimestre de 2023, la faena de vacas creció un 28,5% interanual, de acuerdo a un relevamiento del Mercado Rosario Ganadero (Rosgan), que determinó que en ese período la industria faenó unas 220.000 vacas más que durante igual período del año anterior, representan un 31,4% del total procesado por los frigoríficos.
“Aún no hemos ingresado el período de mayor salida de vacas y los indicadores de faena muestran cifras muy elevadas en relación al stock”, advirtieron desde la entidad.
Por otra parte, solo en el mes de abril, según estadísticas oficiales, el envío de hembras con destino a faena aumentó un 21%, llegando a 315.000 cabezas. Además de este incremento, otro dato llamativo es la cantidad de vacas que ingresaron a corrales de engorde: en los primeros 4 meses del año, los feedlots recibieron unas 136.600 vacas, lo que representa un 45% más que los ingresos registrados el año pasado, durante el cuatrimestre enero-abril.
Si se mantiene este ritmo de faena en hembras, las proyecciones del Rosgan indican que, para 2023, la industria procesaría entre 3,1 a 3,2 M de cabezas en esta categoría, similar al registro de 2009, uno de los años de mayor liquidación de vientres, en medio de una feroz sequía.
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Apenas 0,5%. Al trasladar esa cantidad al rodeo total, representan un 14% de las 23 M de vacas registradas como stock inicial, al 31 de diciembre de 2022. Este porcentaje se ubica apenas medio punto por debajo de lo registrado en 2009.
Tras ese período, el plantel de vacas reflejó una caída de casi 2 M de cabezas por la liquidación, situación que, de acuerdo al Rosgan, impulsó la retención de vientres.
Según la entidad, los años de menor faena se dieron durante el período 2001-2003 y posteriormente en 2011 -tras la fuerte liquidación de los años previos- con promedios de 120 a 150.000 vacas faenadas por mes.
“En tanto que los años de mayor salida se registraron, indudablemente, durante los años 2008 y 2009, afectados por la recordada sequía, durante los cuales los meses pico de faena alcanzaron niveles de 350 a 365 mil cabezas mensuales”, describieron
Pero más allá de estas proyecciones, existe una realidad irrefutable: la salida de vacas registrada hasta la fecha es una de las más altas de los últimos 20 años, tanto en números absolutos como en términos del stock inicial registrado por esta categoría.