Presentaron la pre-serie de un tractor multipropósito para la agricultura familiar

Se trata del micro tractor Chango, una unidad de potencia multipropósito de la que se presentaron los últimos ensayos de la pre serie para su fabricación comercial. Está diseñado para el trabajo, la producción y la mejora de la vida rural que, por su versatilidad y diseño, admite motorizar una variedad muy grande de implementos agrícolas.

Tras 2 años de trabajo en prototipos intermedios para su validación, ensayos y hasta el desarrollo de una norma IRAM para tractores de mancera, la unidad motriz incorpora todos los requerimientos industriales.

La presentación se realizó en una jornada desarrollada en la sede del Instituto de Investigación para la Agricultura Familiar (IPAF) Región Pampeana del INTA, campo experimental Julio Hirschhorn, en Los Hornos, Partido de La Plata, Buenos Aires.

De la presentación, participaron Mariano Garmendia, presidente del INTA; Juan Manuel Fernández Arocena, jefe de Gabinete de la Secretaría de Agricultura de la Nación (SAGyP); Carlos Parera, director Nacional del INTA; Luz Lardone, subsecretaria de Federalización de la Ciencia, Tecnología e Innovación; Diego Ramilo, director del Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico para la Agricultura Familiar (Cipaf) del INTA, y Marcos Hall, director del Instituto de Investigación para la Agricultura Familiar (IPAF) Región Pampeana del INTA, entre otras autoridades y referentes PyMes, de organizaciones de la agricultura familiar y de bancos públicos y privados.


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“Humanizar la tarea rural”. Durante la jornada, organizada para mostrar las prestaciones del Chango, Garmendia destacó el rol del IPAF Región Pampeana en la búsqueda permanente de soluciones para la familia agropecuaria. “Trabajamos para humanizar la tarea rural, para que los productores agropecuarios puedan tener un trabajo digno y mejoren su calidad de vida”, señaló.

“Este tipo de desarrollo plantea un cambio sobre cómo vemos a la agricultura familiar y es un aporte concreto para un sector que produce alimentos”, dijo Garmendia y agregó que mecanizar gran parte de las tareas que se realizan a diario en las chacras generará mejores condiciones de trabajo.

“Por eso, nos estamos planteando tener 50 de estos tractores a lo largo y a lo ancho del país. No solo hay que diseñarlo, probarlo y hacerlo, sino que tiene que estar disponible y tiene que ser accesible para los usuarios”, precisó el presidente del INTA.

Tracción a sangre. En tal sentido, Fernández Arocena valoró el trabajo del equipo de investigadores del INTA, que se enfocó en “pensar y diseñar soluciones para darle una oportunidad a miles de familias que todavía utilizan la tracción a sangre”. Y agregó: “Se estima que en el NEA y en el NOA hay más de 50.000 productores que todavía utilizan la tracción a sangre, por lo que este desarrollo representa una solución que mejora la calidad de vida y de trabajo”.

“Es muy importante potenciar este tipo de diseños y el rol estratégico que tiene el INTA en todo el abanico de soluciones para los distintos sectores del sistema agroalimentario”, destacó el jefe de Gabinete de la SAGyP, quien recalcó que “no hay lugar donde el INTA no esté presente generando soluciones, innovación, tecnología y soberanía tecnológica”.

“Desde la Secretaría de Agricultura vamos a apoyar todos los proyectos que contemplen al Chango como un instrumento de trabajo, con financiamiento local e internacional, para apoyar la producción en serie de esta herramienta transformadora”, se comprometió Fernández Arocena.

Trabajo colaborativo. A su turno, Parera destacó dos aspectos de esta innovación tecnológica para la humanización del trabajo del productor familiar. “Primero, el trabajo colaborativo y cooperativo entre las distintas unidades de la institución que participaron de este desarrollo: la Estación Experimental Hilario Ascasubi (Partido de Villarino, BA), el IPAF Región Pampeana y el Instituto de Ingeniería Rural”, subrayó.

Además, el director Nacional del INTA enfatizó en la co-construcción del diseño. “En este desarrollo participaron los productores aportando su ‘expertise’, su conocimiento para un diseño adaptado a las condiciones y necesidades reales”, indicó.

“Este equipo resume lo que pensamos en el INTA, la forma de trabajo que proponemos, que se basa en la co-construcción del conocimiento, la acción cooperativa entre las capacidades institucionales y la vocación de servir al productor”, concluyó Parera.

Múltiples funciones. Chango es un equipo multifunción que permite mecanizar distintas labores. Tiene una toma de fuerza que permite motorizar diferentes máquinas y herramientas en estado estacionario, como bomba, picadora, moledora y generador de energía, entre otras funciones.

Sergio Justianovich, investigador del IPAF Región Pampeana, explicó que “es un tractor pensado y diseñado para resolver un problema muy visible en el ámbito rural, que tiene que ver con mecanizar diferentes labores para generar mejores condiciones de trabajo y mejor calidad de vida”.

Y agregó: “La novedad es que resuelve y permite realizar todas esas funciones con un diseño muy compacto. Esta particularidad hace que tenga muy buenas prestaciones estacionarias y dinámicas. Esto fue motivo de una solicitud de patente”, destacó.

La jornada. Divididas en Estación Siembra, Estación Labranza, Estación Labores culturales y acarreo, Estación Agregado de Valor, Energía y Riego más de 100 personas pudieron ver al Chango funcionando.

De la jornada a campo también participaron pequeños productores del Cinturón Hortícola de La Plata, Miguel Ángel Cantamutto, director del INTA Hilario Ascasubi; Horacio Berger, director del Centro Regional Buenos Aires Sur del INTA; Guillermo Marrón, director del Instituto de Ingeniería Rural del INTA, y Jorge Carrillo,  -director del Centro de Investigación de Agroindustria (CIA) del INTA, entre otras autoridades y representantes del Ministerio de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires, autoridades de la Chacra Gorina y de la Universidad Nacional de La Plata.

Fuente: INTA

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