El valor de la hacienda duplicó la suba del dólar oficial, en los últimos 12 meses

El alza que tuvo el dólar libre durante el lunes, tras la renuncia de Martín Guzmán como ministro de Economía y la asunción de Silvina Batakis en su reemplazo, generó más incertidumbre y temor porque las fluctuaciones de la moneda estadounidense profundicen el proceso inflacionario y los problemas que enfrenta el país.

En este marco, el mercado Rosario Ganadero (Rosgan) emitió su informe semanal, en el que analiza las ventajas que tiene la hacienda bovina como resguardo de capital.

El resumen del reporte, elaborado por la analista María Julia Aiassa, sostiene que: “En un contexto de creciente incertidumbre cambiaria y ante la falta de alternativas accesibles de protección, en los últimos años el productor ganadero ha recurrido a la hacienda como resguardo de valor, frente a la constante devaluación de la moneda y al riesgo siempre latente de correcciones abruptas en el tipo de cambio”.

Este proceso de valorización de la hacienda comenzó a fines de 2019, tras ganar las PASO presidenciales Alberto Fernández y el Gobierno de Mauricio Macri instaló el cepo cambiario sobre el final de su gestión. En ese momento, la hacienda de invernada fue lo primero que comenzó a revalorizarse, al ser demandada como un activo de refugio.

Bien de libre acceso. Según explica Aiassa esto se da porque “se trata de un bien de libre acceso, lo suficientemente líquido como para asegurar una rápida monetización en caso de requerirlo y que, a su vez, permite proyectar una renta en un mercado sobre el cual el productor tiene lógicamente mayor conocimiento y control del negocio”.

Esta mayor demanda de la invernada como “bien de cobertura” se trasladó luego al ganado de cría, donde primeramente se vio una muy fuerte revalorización de los vientres, que luego se volcó hacia el resto de las categorías, llegando incluso al mercado de reproductores.


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Si se comparan las variaciones interanuales a junio de cada año, para las distintas categorías del mercado -cría, invernada y gordo-, en los últimos 3 ciclos, tanto el ternero de invernada como la vaquillona preñada -que se tomó en este caso como referencia de precio para la cría- subieron, superando la valorización de la cotización del dólar oficial.

Para el novillito gordo, su performance no fue superior en el primero de los ciclos analizados ya que su límite de suba está más directamente condicionado por los precios que puede convalidar el consumidor local en carnicerías y supermercados.

Los números. Sin embargo, a partir del segundo período, desde junio de 2021, la suba de la categoría novillito gordo recibió la misma presión alcista que empezó a ejercer el valor de la invernada sobre los márgenes de la cadena de ganados y carnes.

En conclusión, en los últimos 12 meses, hasta junio de este año 2022, el dólar oficial se apreció 31% interanual, la vaquillona preñada aumentó 79%; el ternero, 60%; y el gordo, 62%.

Todos los índices de aumento de cada categoría superan incluso el incremento general de precios mayoristas que, para la misma fecha (junio 2022), acumularían un 58% de variación interanual.

En este contexto, si bien en las últimas semanas esta ventaja de la hacienda respecto al dólar se moderó, influye mucho la estacionalidad de la zafra de terneros. Aiassa explica en su informe que en los próximos meses la oferta de invernada liviana empezará a escasear, lo cual pondrá nuevamente mayor presión sobre los valores de reposición, que terminarán luego expresándose en subas del (novillo) gordo hacia fin de año”.

Buenas perspectivas. En la actual coyuntura, los valores para la cría siguen siendo buenos, el precio del ternero, pese a la baja temporal sigue estado dentro de sus niveles más elevados, en términos históricos y la vaca de descarte ofrece cotizaciones que permiten mantener adecuados niveles de reposición.

El informe del Rosgan elaborado por Aiassa agrega: “La rueda productiva continúa girando favorablemente para la ganadería, especialmente si nos centramos en la solidez que proyecta la demanda internacional y los muy buenos valores que está convalidando. Bajo este marco, con fundamentos propios muy sólidos, es donde la ganadería se posiciona con mayor aplomo para transitar fases de elevada inestabilidad macroeconómica”.

Y finaliza consignando que “localmente, el escenario político presenta un diagnóstico sumamente complejo y la incertidumbre generada en las últimas horas en torno al rumbo de la economía, vuelve a poner en valor a la hacienda como activo de resguardo, generando así un factor de sostén adicional de precios, de cara a los próximos meses”.

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